¿Nuevo ciclo para el yen?

Hola Amigos, buen día. La semana se inició con elecciones en Japón, que dejaron como resultado la victoria de la oposición de centro izquierda en la Cámara Alta del Parlamento local. La reacción de los mercados fue una baja moderada del par USD/JPY, favoreciendo al yen, y dejando un gap que lentamente se va cubriendo.

Hasta el momento, la coalición gobernante contaba con mayoría parlamentaria, generando una alianza compacta entre el gobierno y el Banco de Japón. La tasa de interés se mantuvo negativa hasta mediados de 2024, con dos alzas poco relevantes el año pasado, y sin cambios en lo que va de 2025, pese a que la inflación de Tokio se mantiene en máximos de varias décadas.

En rigor, el BoJ fue la única institución que prácticamente no varió su tasa en los últimos años, pese a que la pandemia dio lugar a un crecimiento de la inflación casi sin precedentes y en todo el mundo, que obligó al resto de los bancos centrales a endurecer sus respectivas políticas monetarias, que lentamente van relajando desde mediados del año pasado.

Los diferenciales de tasa entre estos bancos y el BoJ, junto al límite al rendimiento de los bonos locales en el 1.5%, y un alza importante del petróleo en 2022 que después fue revertida -entre otros factores- dio lugar a una fenomenal devaluación del yen que llegó en julio de 2024 a 161.30, su mínimo en 38 años.

Un alza de tasa mínima, pero poco esperada, lo llevó a la zona de 140 hace un año, ante un desarme de posiciones de carry trade, especialmente ante el dólar australiano, y varios movimientos que también lo mantuvieron cerca de tal nivel en varias oportunidades en los últimos meses.

Pero el yen perdió una condición fundamental, y es su carácter de activo de refugio, calidad que había guardado hasta 2022 en el inicio de la guerra entre Ucrania y Rusia. Y, como se ve, su reemplazo fue el oro, que pasó de 1800 a 3500 dólares, y el franco suizo, en máximos de 14 años en estos días.

Este cambio en el Parlamento japonés podría dar lugar a una modificación en la disciplina fiscal del país, sobre todo en el límite a los rendimientos de los bonos. Si esto ocurre, el diferencial entre estos y los bonos de la Fed (con notas a 10 que pagan más de 4.5% en estos meses), podría producirse un cambio de tendencia de largo plazo que favorecerá al yen de cara al resto del año, pero también para 2026.

Esta es la nota más importante en este lunes, que ve al dólar caer nuevamente en los principales pares. El euro, de todas formas, no logró consolidar ganancias y en la sesión asiática se mueve en torno a 1.1620, con una ligera tendencia bajista que podría estirarse al resto del día. Para que ello ocurra, la zona de 1.1600 deberá ser vencida, y debajo de ella aparecerán 1.1570 y 1.1550, siguientes soportes de importancia.

La libra esterlina se mueve en forma similar al euro. Abrió la semana en 1.3415, con una tendencia bajista en el corto plazo, que tiene en 1.3365, mínimo de la semana pasada, su principal soporte. Debajo de este se alinean 1.3340 y 13285.

El yen tiene pendiente la cobertura del gap que dejó cerca de 149.00 en el cierre de la semana, y no puede descartarse que siga cayendo en el corto plazo, ante el nuevo escenario político en Japón. Por encima de tal nivel, 149.30, máximo del mes del par USD/JPY será la resistencia a considerar.

La semana que se inicia tendrá como atractivos principales los datos de manufacturas y servicios en Reino Unido, la Eurozona, Alemania y Estados Unidos, todos previstos para el jueves.

Esto sucede en medio de febriles negociaciones entre Estados Unidos y el resto de los países para descomprimir las tensiones derivadas de los aranceles que el gobierno de Trump impondrá, desde el 1 de agosto, a todas sus importaciones. Cualquier anuncio de postergaciones, o de aranceles no previstos, generarán un fuerte impacto en el dólar.

Nada de ello, al menos por ahora, inquieta a la bolsa de Nueva York, que atraviesa un verano inolvidable, con máximos históricos, y a la expectativa de lo que pueda suceder con la tasa de interés de la Fed, próxima a ser recortada. Y si no lo es, los inversores saben que el próximo presidente de la entidad la recortará a antojo de Trump que, como nota dominante, no embistió contra el presidente Powell en los últimos tres días. Todo un logro.

Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el martes.

Moderado crecimiento del euro en el cierre semanal

Hola Amigos, buen día. Después de varios días consecutivos de ganancias, el dólar vuelve a ceder en varios frentes. El euro, que llegó a un mínimo de 1.1550 en la sesión del jueves, nivel que no tocaba desde el 23 de junio, gana posiciones en la sesión europea del viernes, cotizando a 1.1643, casi en su máximo diario. La libra esterlina también se aleja de sus mínimos de la víspera, y se acomoda por encima de 1.3450.

Los datos de ventas minoristas y una baja importante en las peticiones semanales de subsidio por desempleo le habían dado un nuevo respiro al dólar. Sin embargo, la falta de definición en los conflictos entre Estados Unidos y buena parte de los países por los aranceles a las importaciones se mantiene en el centro de atención de los inversores.

Lejos de tales preocupaciones, la bolsa de Nueva York sigue ofreciendo ganancias de importancia. El índice S&P 500 llegó el jueves a un nuevo máximo histórico, en tanto el Dow Jones y el Nasdaq 100 también se muestran fuertes.

El movimiento alcista del dólar se detuvo desde primera hora de la fecha, y así, las monedas europeas apuran su paso alcista. Tal como quedó mencionado, el euro se mueve en torno a 1.1650, y presenta, en el gráfico de 4 horas, indicadores que alientas ganancias adicionales. La superación de 1.1665 le dará un nuevo impulso para comenzar a buscar 1.1705 en las próximas horas.

En tanto, la libra esterlina se muestra algo rezagada respecto al euro. Hay una presunción de que el Banco de Inglaterra podría volver a recortar la tasa de interés a fin de mes. La misma, actualmente en el 4.25%, está un escalón por debajo de la tasa de la Fed, en el 4.5%, lo cual es motivo de protesta permanente por parte del gobierno del presidente Trump.

Para este viernes, la libra presenta un panorama ligeramente alcista, con objetivos en 1.3480 y 1.3520, y soportes en 1.3420 y 1.3380.

En otro orden, el domingo habrá elecciones parlamentarias en Japón, para las cuales la oposición de izquierda moderada se perfila como favorita en las encuestas. El yen está cayendo en forma acelerada en todos los frentes, y ya llegó a 149.00 esta semana. Su destino es incierto en el corto plazo, y muchos apuestan a que una victoria opositora podría generar una recuperación de la moneda nipona durante las próximas sesiones. Para este viernes, 148.70, 149.00 y 149.30 son las resistencias a seguir en el par USD/JPY, con soportes en 148.00 y 147.60.

La onza de oro cotiza a 3353 dólares, otra vez con tendencia alcista en el gráfico de 4 horas, pero sin salir de una lateralización amplia en el rango de precios en que se mueve, y en la que ha ingresado a mediados de junio. El oro deberá superar 3380 dólares para apuntar a 3400 y 3420 dólares, próximas resistencias. Los soportes, en cambio, se encuentran en 3340 y 3320 dólares.

La agenda de noticias del día es modesta, y solo el índice de confianza del Consumidor de la Universidad de Michigan podría tener un impacto en el dólar.

Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, y un muy buen y reparador fin de semana, nos reencontramos el próximo lunes. Hasta entonces.

Un nuevo ataque contra Powell hace temblar al dólar

Hola Amigos, buen día. Cuando la sesión americana del miércoles asomaba como un día normal, sin mayores novedades, y con el dólar escalando posiciones, apareció, como siempre, el presidente Trump. Y esta vez su ataque contra el presidente de la Fed, Jerome Powell, tomó cuerpo, con una carta que, se conoció horas después, presentó en una reunión con legisladores de su partido el martes por la noche, en la cual disponía la salida de Powell, 10 meses antes de finalizar su mandato, en mayo de 2026.

De acuerdo a la versión de dos asistentes a dicha reunión, Trump preguntó si estarían de acuerdo en despedir a Powell, a modo de consulta. El presidente reconoció la existencia de la carta, pero descartó enviarla por el momento.

En rigor, Trump no tiene el poder para despedir a Powell, por una enmienda constitucional. A la manera de como actuaría un gobierno de un país tercermundista, el motivo que exhibiría el gobierno para sacarse de encima a Powell es un supuesto fraude por 2.500 millones de dólares por refacciones en el edificio de la Fed, que tiene ya más de 100 años, algo incomprobable.

El motivo real es la negativa de Powell a recortar la tasa de interés, actualmente en el 4.5%, con una inflación sensiblemente menor, en el 3%, pero lejos del objetivo del banco central del 2%. Con total desparpajo, Trump aduce que otros bancos centrales, como el BCE, han recortado en varias oportunidades la tasa, actualmente en el 2.15%, o el Banco de Inglaterra, cuya tasa fue recortada recientemente al 4.25%.

Las consecuencias de la intromisión del poder político en la Fed son poco imaginables. Algunas de ellas ya se están viendo. La caída que sufrió el dólar desde enero pasado, y en especial desde abril, es lo más palpable, pero no lo único.

Los mercados han perdido la confianza en el dólar, y se han volcado al franco suizo, en máximos de 14 años. También, en parte, en la onza de oro, que ahora quedó algo rezagada, con un máximo histórico de 3500 dólares que tocó el 22 de abril, y llegando hasta ese nivel sin más fundamentos que los desaguisados que provoca Trump día tras día.

Los diferenciales de tasa de interés en nada influyen en este tiempo, y el llamado “carry trade”, que lleva a los capitales a tomar deuda en monedas de bajo rendimiento como el yen y comprar otras de alto rendimiento, pasa por otro carril.

Los tipos de cambio del dólar son elocuentes en este sentido. El euro, con la tasa del BCE en el 2.15% (y bajando) llegó a máximos de 4 años pocos días atrás, en 1.1830. El yen está muy débil, claro, pero su caída responde a cuestiones propias de Japón y, dicho sea de paso, las elecciones del próximo domingo podrían cambiar varias cosas en la actual disciplina fiscal del gobierno actual, al que las encuestas no favorecen en absoluto. En otras palabras, en poco tiempo el yen podría volver a ser un activo de gran valor, y no un instrumento de especulación de los hedge funds como sucede ahora.

La reacción de los mercados el miércoles fue determinante. Cuando trascendió la carta de Trump el dólar cayó en todos los frentes, violentamente, pero a un nivel moderado. Conocido este efecto, el gobierno se apuró a desmentir el intento de salida de Powell. No suela creíble el gobierno, y mucho menos Trump: la salida de Powell es inminente, y con ello llegará una nueva baja del dólar.

El euro vuelve sobre sus pasos y, en la sesión asiática del jueves, se mueve en torno a 1.1630, lejos de 1.1725 que tocó en su máximo de la víspera. El gráfico de 4 horas apunta nuevamente a la baja, con un primer soporte en 1.1595, seguido de 1.1560 y 1.1530, ofreciendo resistencia las zonas e 1.1665 y 1.1705.

La libra esterlina cotiza a 1.3411, y sigue presentando una tendencia bajista en el corto plazo, saliendo de la zona de sobreventa en que había ingresado el miércoles. Los soportes a seguir son 1.3365 y 1.3365, con resistencias en 1.3440 y 1.3485.

El yen cotiza a 147.75, con una tendencia que se perfila a la baja en el gráfico de 4 horas para el USD/JPY, luego del quiebre de una línea alcista contra la cual realizó un pullback. El quiebre de 147.20, primer soporte, llevará al precio al mínimo del miércoles en 146.85; las resistencias, en cambio, se encuentran en 148.10 y 148.70.

La onza de oro cerró el miércoles a 3347 dólares, con una tendencia alcista en el gráfico de 4 horas, luego de llegar a un máximo del 23 de junio en 3376 dólares, segunda resistencia para las próximas horas. Antes, 3358 dólares será el nivel a seguir, con soportes en 3320 y 3302 dólares.

La agenda del día incluye las cifras de ventas minoristas de junio, con mediano impacto en el dólar. Aunque, visto lo que viene sucediendo en las últimas semanas, cualquier presentación de Trump es más potente.

Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el viernes.

Aumenta la inflación y el dólar se fortalece

Hola Amigos, buen día. Los datos de inflación de Estados Unidos de junio quedaron por encima de los anteriores, aunque debajo de las expectativas de los analistas del sector. El costo de vida a nivel interanual creció al 2.7% el mes pasado, en tanto la medición subyacente, que excluye las variables de alimentos y energía quedó en el 2.9%.

El informe le dio aire al asediado presidente de la Fed, Sr. Powell, que no solo lucha contra la inflación, sino con una serie de ataques desde las más altas esferas del gobierno que buscan destituirlo, o forzarlo a renunciar antes de la finalización de su mandato, en mayo de 2026.

Después de varias declaraciones agresivas por parte del presidente Trump,  el martes fue el secretario del Tesoro, Sr. Bessent, quien declaró que Powell debe irse lo antes posible.

De allí es que los datos de inflación no solo le dieron un alivio a la Fed, sino que generaron un impulso alcista del dólar en todos los frentes, que se mantiene en el inicio de la sesión asiática del miércoles.

Así, el euro quebró 1.1600 en un mínimo que no tocaba desde el 26 de junio pasado, en tanto la libra esterlina borró todo lo que había ganado -sin muchos fundamentos, es verdad- desde el 23 del mes pasado.

Por su parte, el yen llegó a 149.00, nivel mínimo desde mayo pasado, y el franco suizo, otro instrumento de refugio, llegó a 0.8023, mínimo desde el 23 de junio. Por el contrario, los rendimientos de los bonos del Tesoro llegaron al 4.49% en las notas a 10 años, siendo este el principal impulsor de la baja del yen.

Lejos de festejar estas cifras está Wall Street. A una inflación que se aleja del objetivo del 2% de la Fed le seguirá una política monetaria dura por parte del organismo durante un buen tiempo. Con estas cifras, queda descartado cualquier recorte de tipos a fin de mes, en la próxima reunión del FOMC, y los operadores de la bolsa de Nueva York lo saben. Los índices principales cayeron con fuerza en la sesión del martes, aunque en todos los casos mantienen marcadas tendencias alcistas de corto plazo.

De todos modos, y pese a las cifras mencionadas, el dólar está lejos de recuperar su esplendor. La guerra comercial se mantiene intacta, y el presidente Trump no deja de aparecer a diario para anunciar aranceles a las importaciones desde prácticamente todo el mundo. El martes fue el turno de Indonesia.

Técnicamente, la caída de las monedas europeas sí comienza a volcar la balanza a favor del billete. La libra esterlina, por caso, quebró su línea de tendencia alcista medida en el gráfico diario, en un rally que venía observando sin fisuras desde mediados de enero. Pero será el quiebre de 1.3370 el que generará una tendencia bajista más sustentable para los próximos días. La empresa parece difícil para el dólar: desde el día 1 de este mes, la libra cedió más de 500 puntos, casi sin pausas, y aparece sobrevendida en el corto plazo.

La potencial caída de la libra parece cuestión de tiempo. Los datos de inflación de Reino Unido, el miércoles a primera hora, podrían generar una recuperación momentánea de la moneda británica, antes de iniciar un nuevo ciclo bajista. Para el miércoles, debajo de 1.3375 aparecen 1.3330 y 1.3300 como siguientes soportes. Ante una recuperación, las resistencias serán 1.3440 y 1.3485.

El euro detuvo su caída en 1.1595, 61.8% de retroceso de su alza anterior, y allí radica la probabilidad de que recupere posiciones este miércoles. La sobreventa del gráfico de 4 horas también anticipa ganancias para la moneda única, que tendrá objetivos en 1.1630 y 1.1660 para las próximas horas, con soportes en 1.1560, 1.1530 y 1.1505.

El yen, por su parte, cayó a 149.00 el martes, con una marcada tendencia bajista que podría acentuarse durante el resto de la semana. La sobrecompra extrema del par USD/JPY impone una corrección bajista inminente, que tendrá soportes en 148.50 y 148.00 para la sesión del miércoles. En cambio, las resistencias se encuentran en 149.30 y 149.80.

La onza de oro cayó el martes a 3320 dólares, generando, en el gráfico de 4 horas, una tendencia bajista que puede estirarse a la sesión de la fecha. Los soportes a seguir son 3302 dólares (línea de tendencia alcista que le da sustento al metal desde dos semanas atrás) y 3282 dólares, con resistencias en 3341 y 3358 dólares.

La agenda del miércoles incluye las cifras de inflación mayorista, que pueden tener un fuerte impacto en el dólar, los índices de producción industrial y utilización de la capacidad instalada, y por la tarde el Libro Beige de la Fed.

Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el jueves.

Euro y libra apuntan a la baja

Hola Amigos, buen día. Con dificultades, el dólar recupera terreno en varios frentes, y se aleja de sus mínimos de varios años ante las monedas europeas. El euro cerró el lunes a 1.1660, apenas por encima de su mínimo diario, en tanto la libra esterlina se desplomó a un mínimo que no tocaba desde el 23 de junio pasado. El franco suizo también retrocede, aunque en menor medida, y apenas se acerca a 0.8000.

A la vez, el oro retrocede en medio de las turbulencias propias de estos tiempos. La onza abrió la semana al alza, tocando 3380 dólares ante los anuncios de nuevos aranceles a la Unión Europea y México en sus exportaciones a Estados Unidos. El presidente Trump impuso un 30% de aranceles en ambos casos, para abrirse, durante la sesión del lunes, a nuevas negociaciones, frenando la escalada del metal precioso durante la tarde del lunes.

En otro orden, el propio Trump prometió enviar más armas a Ucrania en su combate con Rusia. Pero también instó a Moscú a llegar a un acuerdo de paz con Kiev dentro de los próximos 50 días; si eso no ocurre, sus exportaciones, hasta ahora ¿llamativamente? excluidas de todo arancel, sufrirían un 50% de impuestos.

En otro orden, los bonos del Tesoro pierden valor, impulsando a los rendimientos. Las notas a 10 años vieron elevar su tasa al 4.43% en su máximo del lunes, limitando justamente al franco suizo, y llevando muy a la baja al yen. La moneda nipona se acerca, de este modo, a 148.00, su valor más bajo del mes pasado.

La Bolsa de Nueva york tuvo un día de vaivenes. Después de una apertura negativa del lunes, los futuros del Dow Jones, S&P 500 y Nasdaq 100 se recuperaron, para volver a ceder sobre el cierre de la sesión. Sus respectivos gráficos de corto plazo muestran una tendencia alcista, prometiendo mayores ganancias para la sesión del martes.

Los mercados se abocan ahora a conocer los datos de inflación de junio, que se conocerán el martes a las 8:30 del este. Al respecto, se espera que los aranceles ya comiencen a surtir efecto en el costo de vida, justificando la actitud conservadora de la Fed, encabezada por el debilitado presidente Powell.

La inflación interanual a junio en la medición subyacente (excluye alimentos y energía) podría haber crecido al 3% frente al 2.8% de mayo, y la medición general ascendería al 2.7% frente al alentador 2.4% del mes pasado. En términos mensuales, ambas mediciones arrojarían un 0.3%, lejos del 0.1% anterior.

Como se ve, la inflación está lejos de ser vencida, y mucho más ahora que los aranceles están en el aire, con la promesa de aumentar en los próximos meses. De este modo queda prácticamente descartado un recorte de tipos de interés en julio, y esta posibilidad pasará a septiembre.

Si estos pronósticos se cumplen, el euro podría perder terreno, con soportes en 1.1630, 1.1580 y 1.1550; las resistencias: 1.1700 y 1.1730.

La libra esterlina ofrece signos de sobreventa, y podría ganar algo de terreno antes de iniciar un nuevo ciclo bajista. En dicho caso, 1.3450 y 1.3485 serán las resistencias, con soportes en 1.3405 y 1.3370.

El yen no brinda señales de recuperación, y tiene un primer objetivo en 148.00, seguido de 148.40; los soportes, en cambio, se encuentran en 147.20 y 146.75.

Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el miércoles.

Crece la presión sobre Powell; dólar inquieto

Hola Amigos, buen día. Durante la tarde del viernes trascendió que el presidente de la Fed, Jerome Powell, consideraría renunciar a su cargo, a falta de 10 meses de su finalización formal. La versión surgió de entidades crediticias vinculadas al estado , y se suma a la enorme presión que ejerce Donald Trump sobre el funcionario, prácticamente desde el inicio de su mandato.

Trump, que promovió a Powell a su cargo actual a inicios de su primer mandato presidencial, se enemistó en 2018, cuando lejos de mantener la tasa casi en cero, como la recibió de Janet Yellen, comenzó a aumentarla, mostrando una notable independencia respecto al poder político.

Durante el mandato de Biden, en el período posterior a la pandemia, la Fed, encabezada por Powell, se mantuvo en la cómoda posición de emitir dinero sin respaldo, para beneplácito del presidente que, sin dudar, lo promovió para un segundo mandato.

Apenas acordada su continuidad al frente de la Fed, Powell descubrió que la inflación, que ya superaba el 5.5% a fines de 2021, no era el “fenómeno transitorio” del cual hablaba hasta entonces. Inmediatamente cesaron las emisiones de dinero sin control, y la tasa aumentó hasta el 5.5%, que mantuvo hasta fines de 2024.

La asunción de Trump no hizo sino agravar el enfrentamiento, que llegó a su nivel más dramático a mediados de abril, cuando directamente habló de una destitución de Powell.

La reacción del mercado fue igual de dramática: el euro alcanzó un máximo de varios años, el oro un máximo histórico, y los futuros de los índices de Nueva York (el anuncio fue hecho en la sesión asiática del 23 de abril) se desplomaron en minutos.

Al descubrir el escándalo que había provocado, Trump se desdijo, pero no por mucho tiempo. En las últimas semanas volvió a atacar a Powell llamándolo burlonamente “Demasiado Tarde Powell”, y exigiendo una tasa al 1.5%, es decir, 3 puntos porcentuales menos que la tasa actual.

El elegido para reemplazar a Powell va tomando forma, y todo apunta a que será Scott Bessent, actual secretario del Tesoro. Si esto efectivamente sucede, la independencia de la Fed estará en peligro, principal pilar del dólar. Demás está decir que la tasa quedará en no más del 1% desde entonces, con el peligro de un rebrote inflacionario de alcance inimaginable.

En este particular contexto, con Trump en el centro de la política, economía y mercados globales, el dólar sigue penando en todos los frentes.

Durante el fin de semana, el presidente anunció que dos de sus aliados principales, la Unión Europea y México, tributarán un 30% sobre sus exportaciones a Estados Unidos, una cifra que se suma al 25% que sufrirá Japón, y un 50% Brasil. Claro que el 1 de agosto, fecha que unilateralmente impuso Trump y que es el tercer plazo después de dos postergaciones, aun queda lejos. Realmente, llama la atención la paciencia que el mundo le tiene a Trump, sin generar acuerdos comerciales que excluyan a Estados Unidos.

La semana se inicia sin datos relevantes, pero tendrá en las cifras de inflación (minorista y mayorista) y de ventas minoristas, previstas entre el miércoles y jueves, sus principales focos de atención.

El euro cerró la semana a 1.1691, con una ligera baja que, probablemente, se amplíe en las primeras horas del lunes. El anuncio de aranceles contra la UE podría provocar una caída importante de la moneda única, que tendrá soportes en 1.1660, 1.1630 y 1.1605 durante las próximas horas. Las resistencias a seguir serán 1.1730 y 1.17550.

La libra esterlina cayó fuerte el viernes, cerrando la semana a 1.3491, después de un decepcionante PBI mensualizado de Reino Unido. El gráfico de 4 horas del par GBP/USD apunta a la baja, con siguientes soportes en 1.3450 y 1.3420 para la sesión del lunes; al alza, 1.3525 y 1.3560 serán los niveles a considerar.

El yen volvió a caer el viernes y cerró a 147.40, con el gráfico de 4 horas en clara tendencia alcista. Las próximas resistencias son 147.60 y 148.00, máximo de junio, con soportes en 147.20 y 146.75. El fuerte aumento de los rendimientos de los Bonos del Tesoro, junto con una recuperación del petróleo están impactando fuerte en la moneda nipona.

La onza de oro cerró el viernes a 3356 dólares, con una clara tendencia alcista del gráfico de 4 horas, con siguientes resistencias en 3367, 3371 (61.8% de retroceso de su baja anterior) y 3387 dólares. Los soportes, en cambio, se encuentran en 3339 y 3323 dólares.

El euro, en mínimos de 15 días

Hola Amigos, buen día. El mercado de divisas presenta un panorama variopinto, con el dólar recuperando posiciones ante algunas monedas, en tanto se mantiene débil en otros frentes.

Así, el euro retrocedió el jueves a 1.1660, mínimo que no tocaba desde el 26 de junio, sin noticias relevantes que motiven tal movimiento. La baja del euro, parcialmente revertida sobre el cierre de la sesión americana, podría extenderse a las próximas horas. El quiebre del mínimo mencionado impulsará a la baja al par EUR/USD, que tendrá en su caso soportes en 1.1630 y 1.1605. Ante una hipotética recuperación, el euro encontrará resistencias en 1.1730 y 1.1765.

La libra esterlina, en tanto, cotiza a 1.3572 frente al dólar en la sesión asiática del viernes, a la espera del PBI mensualizado de Reino Unido. La moneda británica se ha visto debilitada parcialmente en las últimas sesiones, después de tocar un máximo de casi 4 años rozando 1.3800. El gráfico de 4 horas del par GBP/USD presenta una tendencia moderada a la baja, que podría acelerarse ante un dato negativo en el PBI, que se conocerá a las 2:00 am del este.

El yen, en tanto, recupera posiciones lentamente ante el dólar, con un precio actual de 146.31. La moneda nipona, afectada por los aranceles que el presidente Trump le impuso a Japón por el 50% a las importaciones desde ese país, no logra encontrar el camino de una recuperación más sustentable. El quiebre de 145.80 le daría algún impulso adicional, para buscar 145.40 como siguiente soporte de importancia.

La onza de oro se mueve en torno a 3325 dólares, con una tendencia ligeramente bajista en el gráfico de 4 horas. El metal precioso se ve incapaz de apuntar a máximos importantes, aunque tampoco cede con firmeza de los 3300 dólares. El oro se mueve en un rango relativamente estrecho de precios, y deberá superar 3345 dólares para volver a ganar terreno en las próximas sesiones. El quiebre de 3280 dólares cambiará su destino de alcista a bajista para la semana entrante.

La semana cierra sin novedades relevantes en cuanto a datos macroeconómicos. La atención de los mercados está puesta en la definición de la guerra comercial iniciada por Trump apenas asumió el 20 de enero, la cual tuvo -y tiene- algunas aristas poco entendibles.

La nueva fecha de entrada en vigencia de los aranceles a las importaciones -1 de agosto- no parece una fecha límite, después de las postergaciones impuestas por el propio Trump.

En la búsqueda de pistas sobre estas cuestiones está ahora centrada la atención de los inversores que, mientras tanto, palpitan ganancias importantes en las acciones principales (los balances trimestrales se conocerán próximamente), lo cual motivó que el jueves el S&P 500 alcance un nuevo máximo histórico.

Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, y un muy buen y reparador fin de semana, nos reencontramos el próximo lunes. Hasta entonces.

El dólar se mantiene inmutable pese a los anuncios de la Fed

Hola Amigos, buen día. Las Minutas de la última reunión de política monetaria de la Fed dejó en claro que el organismo no tiene apuro por recortar la tasa de interés. La misma, que se mantiene en el 4.5% desde varios meses atrás, luce algo alta para una inflación que se ubica lejos del objetivo del 2% del banco central, pero mucho más cerca que el año pasado cuando la tasa se encontraba en el 5.5%, con la inflación superando por mucho el 4%.

Las decisiones de la Fed irritan al presidente Trump, que a diario pugna por la renuncia del presidente del organismo, Sr. Powell. Esta presión contra el funcionario es el principal motivo que lleva al dólar a caer ante las monedas principales, y a que las noticias que lo favorecen apenas le den algún respiro.

Los mercados suponen que una salida de Powell, antes de tiempo o en el plazo previsto de mayo de 2026, hará que la Fed pierda su tradicional independencia. Se espera que Trump coloque en su lugar a alguna figura afín a su política, que pugna por una tasa de interés de no más del 1%, sin cuidar mucho lo que suceda con la inflación, a la cual el presidente no le presta atención.

Su errática política de aranceles, con idas, vueltas, amenazas, advertencias y postergaciones, ha hecho quedar en el ridículo a su gobierno en varias oportunidades en las últimas semanas.

La nueva fecha límite que impuso Trump para comenzar a cobrar aranceles es el 1 de agosto. El miércoles, su gobierno anunció aranceles para países que no mueven la aguja de la economía global, con una excepción: Brasil. Al país sudamericano le tocará pagar un 50% de aranceles sobre sus exportaciones, por motivos fundamentalmente ideológicos, lo cual demuestra lo vacío de la propuesta de Trump, que inauguró con el pomposo título de “Día de la Liberación” a inicios de abril. Desde allí no logró establecer fechas y tasas de aranceles, y tampoco tranquilizar a los mercados.

Las divisas se mueven al mismo ritmo cansino, con reacciones extrañas, movimientos poco analizables y sin un rumbo claro. Podríamos decir que es un espejo de Trump y su gobierno.

El euro se ha movido 80 puntos en la semana, contando los máximos y los mínimos. A la baja, la zona de 1.1680 es el nivel a tener en cuenta. Su quiebre podría producir una recuperación más sustentable del dólar, aunque paradójicamente los máximos de la moneda única no están lejos. La superación de 1.1830, su más alto nivel en 4 años, le abriría las puertas para visitar 1.2000, un precio que pone los pelos de punta al Banco Central Europeo. Para muestra, cabe recordar que durante el gobierno de Biden la moneda única chocó una y otra vez contra 1.2000, y los funcionarios del BCE señalaron varias veces que era un precio límite, con intervenciones verbales que lo mantuvieron a raya.

La libra esterlina, en tanto, se perfila a la baja con un precio de 1.3582 en la sesión asiática del jueves. Su tendencia del gráfico de 4 horas es bajista, con próximos soportes en 1.3460 y, sobre todo, 1.3525, mínimos de la semana hasta el momento.

El yen, en tanto, sigue sufriendo los embates de Trump contra Japón, país al que castigó con aranceles del 25% desde el 1 de agosto. Cualquier negociación que atenúe tal carga le daría un alivio a la moneda nipona. Por el momento eso no ocurrirá y las resistencias del par USD/JPY se ubican en 146.70 y 147.20, los máximos de la semana.

La onza de oro opera a 3312 dólares en la sesión asiática del jueves, y tiene en 3333 dólares un punto de apoyo en la línea de tendencia bajista en el gráfico de 4 horas, que guía en esa dirección al metal precioso. El quiebre de la misma cambiaría el opaco destino de la onza, con siguientes resistencias en 3347 y 3367 dólares. Los soportes, en cambio, se encuentran en 3300, 3280 y 3270 dólares.

La agenda del día incluye las peticiones semanales de subsidio por desempleo a las 8:30 del este.

Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el viernes.

Los mercados esperan, en calma, las Minutas del FOMC

Hola Amigos, buen día. El dólar volvió a ganar posiciones el martes en prácticamente todos los frentes, en una sesión sin noticias relevantes. Tan solo la ratificación, por parte del presidente Trump, de que no habrá nuevas postergaciones en la implementación de aranceles a las importaciones, con fecha prevista para el 1 de agosto, tuvo algún impacto en los activos principales.

El euro volvió a tocar 1.1680 en su mínimo diario, aunque cerró la sesión en 1.1714, con una tendencia que lentamente pierde fuerza alcista. Sin embargo, el billete se muestra incapaz de ganarle la pulseada a la moneda única, para lo cual necesita quebrar 1.1630, lejos del nivel actual. Para este miércoles, el gráfico de 4 horas se perfila a la baja, con siguientes soportes en 1.1680, 1.1660 y 1.1630, y resistencias en 1.1730, 1.1765 y 1.1805.

La libra esterlina sí cayó con fuerza el martes, alcanzando un nuevo mínimo que no tocaba desde el 24 de junio. La moneda británica se muestra más débil que el euro en estos días, y sobre todo mucho más volátil. El quiebre de 1.3530, 61.8% de retroceso del alza anterior y mínimo de la víspera, provocará una caída mayor, con soportes en 1.3500 y 1.3470; las resistencias, por su parte, se hallan en 1.3600 y 1.3630.

El yen volvió a caer con fuerza ante el dólar, afectado por los aranceles del 25% que Japón deberá pagar en sus exportaciones a Estados Unidos, salvo algún acuerdo de último momento, que probablemente se esté negociando. La moneda nipona detuvo su caída rozando 147.00, apenas por encima del 76.4% de retroceso de la baja 148.02/142.67, para recuperar algunas posiciones, algo que podría estirarse a las próximas horas. En dicho caso, 146.20 y 145.80 serán los soportes a considerar, con resistencias en 146.90 y 147.30.

La onza de oro quebró la zona de 3300 dólares una vez más, y cayó al 61.8% de retroceso del alza 3247 /3365 dólares. La relajación de los mercados, por ahora modesta, está desinflando de a poco al metal precioso, que tiene en las próximas horas soportes en 3285 y 3270 dólares, y resistencias en 3323 y 3340 dólares.

El dato más importante de este miércoles tendrá lugar a las 2:00 pm del este, cuando se conozcan las Minutas de la última reunión de política monetaria de la Fed. En la misma, el Comité ratificó su tasa de interés del 4.5% que tanto critica Trump, y las Minutas probablemente no ofrecerán muchas pistas acerca de un recorte de tipos en la próxima reunión, prevista para fin de mes. Sin embargo, son muchos los analistas que apuestan por dos recortes en 2025, el primero de los cuales podría producirse en septiembre. Incluso, algunos arriesgan sobre el primer recorte en la reunión de este mes.

Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el jueves.

Trump posterga los aranceles, y frena la recuperación del dólar

Hola Amigos, buen día. Como viene sucediendo en los últimos tiempos, las decisiones del presidente Trump provocan impactos importantes en los mercados. El lunes, por caso, anunció que los aranceles a las importaciones desde Japón ascenderán al 25%, acelerando la caída del yen. Más tarde, postergó la negociación de los aranceles a más de 170 países al 1 de agosto, fecha en la que, originalmente, entraban en vigencia tras el 8 de julio, anterior fecha límite.

El dólar baila al compás de estos anuncios, que aparecen en forma inesperada a cualquier hora del día, y sin solución de continuidad. Claro está, no son inesperados para algunos agentes, los formadores de precios, que antes de las noticias mueven los precios en dirección contraria a la que tomarán después.

El euro cedió de 1.1700 por primera vez en varios días, para retomar la senda alcista más tarde. Ya en la sesión asiática del martes cotiza a 1.1742 frente al dólar, renovando su tendencia alcista de corto plazo. Solo el quiebre de 1.1700 podría hacer trastabillar nuevamente a la moneda única, algo que podría venir de la falta de acuerdo entre Estados Unidos y la Unión Europea en materia de aranceles.

Para la sesión del martes, sin datos relevantes en el medio, el euro tendrá resistencias en 1.1780, 1.1805 y 1.1830, los máximos del año. A la baja, 1.1705, 1.1680 y 1.1660 serán los soportes a seguir.

La libra esterlina, en tanto, cotiza a 1.3635 frente al dólar, algo rezagada respecto al euro, con una tendencia que se mantiene ligeramente bajista en el corto plazo. La superación de 1.3675, primera resistencia, le abrirá las puertas de 1.3705 y 1.3735, siguientes resistencias, con soportes en 1.3595 y 1.3565. La libra se encuentra ahora pendiente del PBI mensualizado de Reino Unido, previsto para el viernes.

El yen se vio notoriamente perjudicado por los anuncios de aranceles a Japón, y cayó debajo de 146.00 en la tarde del lunes de Nueva York. El par USD/JPY apenas frenó en el 61.8% de retroceso de la baja 148.02/142.80, y mantiene una tendencia alcista en el gráfico de 4 horas. Las próximas resistencias se hallan en 146.50, 146.75, 76.4% del mismo movimiento, y 147.00. En cambio, los soportes se encuentran en 145.75 y 145.40.

Los anuncios de Trump despertaron a la onza de oro, que ganó 50 dólares en pocas horas. El metal precioso se ubica en la zona de 3335 dólares, con una ligera tendencia alcista en el gráfico de 4 horas, y próximas resistencias en 3347 y 3365 dólares. Los soportes a considerar son 3323 y 3311 dólares.

Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el miércoles.