El dólar cae ante una inflación estable

Hola Amigos, buen día. Las cifras de inflación de abril conocidas el miércoles arrojaron cifras en línea con lo esperado. La medición general en términos interanuales quedó en el 3.4%, frente al 3.5% anterior, y en términos mensuales creció solo un 0.3%, frente al 0.4% esperado.

La medición subyacente, que excluye las variables de alimentos y energía mostró un crecimiento del 3.6% en los últimos doce meses, esperado por los mercados.

Por otro lado, las ventas minoristas, quedaron sin cambios en abril, después del inesperado crecimiento del 0.7% en marzo, en tanto el índice manufacturero de Nueva York tuvo su tercera marca más negativa en 6 meses.

En conjunto, estos datos generaron una caída importante del dólar en todos los frentes, con la bolsa de Nueva York acelerando su crecimiento. Los futuros del índice Dow Jones cerraron la jornada muy cerca de su máxima marca histórica, que alcanzó el 1 de abril en 40055 puntos.

En este contexto, el euro llegó a su máximo del 9 de abril en la zona de 1.0880, pese a la sobrecompra que presentaba antes de los informes antes mencionados. La moneda única se vio impulsada por la baja del dólar, aunque la chance muy marcada de que el Banco Central Europeo comience a recortar la tasa en junio, mucho antes que la Fed, limita las posibilidades alcistas del par EUR/USD. Por encima del nivel actual, las zonas de 1.0905 y 1.0930 serán las resistencias a seguir para el euro, con soportes en 1.0865, 1.0830 y 1.0800.

La libra esterlina también sacó ventajas de la debilidad del dólar, con un máximo de poco más de un mes en 1.2685. También el Banco de Inglaterra viene dando señales de un pronto recorte de tasas, por lo que la moneda británica podría ceder en cualquier momento. Los soportes de la libra aparecen en 1.2630 y 1.2590.

Tanto el euro como la libra aparecen sobrecomprados en extremo ante el dólar en el corto plazo. De allí es que convendrá tomar muy en cuenta los soportes propuestos en ambos pares.

El yen recuperó terreno en la víspera, ante una baja sensible de los rendimientos de los bonos del Tesoro, que han sido su principal referencia en la caída que, desde marzo de 2022, viene sufriendo la moneda nipona. De todas formas, sus continuas alzas y bajas casi verticales tientan al análisis a través de Fibonacci, que cumple a rajatabla con cada uno de sus ratios importantes. El miércoles, el yen rebotó unos puntos debajo de 154.90, donde apareció el 38.2% de retroceso del alza 151.85/156.81. Por el momento, el yen no aparece como una opción del todo viable.

Pero, sin dudas, la estrella del día fue la onza de oro. El 19 de abril había dejado un gap en 2389 dólares, que milimétricamente fue a buscar en la víspera, casi un mes después. Los gaps siempre se cubren es un uno nuestros principios técnicos, y una vez más volvió a cumplir. De esta manera, el oro queda cerca del máximo histórico del 12 de abril en 2432 dólares, aunque la sobrecompra que presenta limitaría su llegada a tal nivel en el corto plazo.

La agenda del día incluye las peticiones semanales de subsidio por desempleo a las 8:30 del este, único informe importante que puede tener impacto en los precios de las monedas principales. De todas formas, una corrección bajista del dólar parece ser lo más visible para las próximas horas.

Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el viernes.

Powell dice una cosa, los mercados escuchan otra

Hola Amigos, buen día. Si bien no es nuevo ni sorpresivo, llama la atención la expectativa de los mercados buscando mínimos indicios de recortes de tipos de interés por parte de la Fed.

El martes, los datos de inflación mayorista quedaron por encima de lo esperado -nada anormal en estos tiempos- y el presidente del banco central, Sr. Powell, se encargó de remarcar que habrá que tener paciencia con la tasa de interés alta “dejando que haga su trabajo”. No hay muchas dudas ni interpretaciones que hacer.

Sin embargo, el dólar cayó en todos los frentes, en la suposición de que como la inflación irá a la baja la Fed recortará la tasa en septiembre, algo ya prácticamente descontado por los mercados.

Si se considera que desde el Banco Central Europeo llegan señales algo difusas de que habrá recorte en junio, poco se puede esperar a favor del euro, y mucho a favor del dólar. El martes ocurrió todo lo contrario.

La moneda única, que técnicamente había quebrado una línea bajista en 1.0800, aceleró hasta la zona de 1.0826, donde se topó con otra línea, proveniente de los máximos de diciembre, que le puso límite a sus ganancias. ¿Retrocederá unos cuantos puntos la moneda única antes de iniciar un nuevo ciclo alcista? Todo parece indicar que sí.

La libra esterlina, alentada por los datos de empleo positivos de Reino Unido, aceleró en la víspera, acompañando al euro, aunque el festejo podría durar poco: el Banco de Inglaterra envió señales bastante claras de su intención de recortar tipos en junio, con una votación -que tuvo lugar el jueves pasado- que por primera vez en mucho tiempo mostró dos votos a favor de tales recortes.

El yen, como sucede prácticamente todos los días, volvió a caer ante el dólar. Si bien el billete perdió frente al resto de las monedas, un primer y rápido impulso general en su favor fue aprovechado por los fondos, que una vez más estiran la caída de la moneda nipona, cuando suena de fondo la posibilidad de que se produzca una nueva intervención por parte del Banco de Japón y el Ministerio de Finanzas de ese país.

La onza de oro aprovecha la ligera baja de los rendimientos de los bonos del Tesoro, que se alejan de sus máximos de varios meses, para acercarse a la cobertura de un gap que quedó a mediados de abril en 2388 dólares. Su superación podría acercar al metal precioso a los máximos históricos del 12 de abril en 2432 dólares.

La bolsa de Nueva York retomó su ola alcista en la víspera, con los futuros del Dow Jones buscando nuevamente sus máximos históricos del 1 de abril, cuando rozó los 40.000 puntos. No le será fácil quebrar dicha marca en un primer envión, aunque parece prepararse para tal cometido. Las acciones líderes sigue ofreciendo ganancias importantes día tras día, ahora azuzadas por los recortes de la Fed que ven los analistas del sector.

En buena parte, que esto suceda dependerá de los datos de inflación minorista y de ventas minoristas de abril, que se conocerán este miércoles a las 8:30 del este. Las cifras referidas podrían ser mixtas, generando un fuerte revuelo en los mercados.

Por un lado, la medición subyacente interanual (excluye alimentos y energía y ocupa los últimos 12 meses) podría quedar en el 3.6%, debajo del 3.8% anterior. La medición mensual quedaría en el 0.3%, también debajo de la anterior. Sin cambios o con una ligera baja quedará la medición general, tanto mensual como interanual.

Respecto a la ventas minoristas, podrían haber caído al 0.3% de crecimiento, frente al 0.7% anterior.

Como se ve, un panorama mixto, con dos de los 4 datos más importantes a conocerse a la misma hora. La volatilidad del momento exige respeto, será mejor tenerlo.

Eso sí, la baja del dólar de la víspera, sin datos que lo ameriten, invita a pensar en su alza inmediata posterior a las publicaciones.

Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el jueves.

Mercado expectante antes de los datos de inflación mayorista

Hola Amigos, buen día. El dólar ofrece pocas variantes este martes, antes de la publicación de los datos de inflación mayorista de abril, previstos para las 8:30 del este. Los pronósticos hablan de un aumento del 0.2% en la medición subyacente, que excluye alimentos y energía, valor similar al anterior. Respecto a la medición general, quedaría apenas por debajo de los valores de marzo.

Además, los mercados esperan ansiosamente la presentación del presidente de la Fed. Sr. Powell, quien hablará desde las 11:00 en Amsterdam. Pese a que tanto Powell como otros funcionarios del banco central han repetido que la tasa de interés quedará sin cambios durante varios meses más, las últimas cifras de empleo, manufacturas y servicios quedaron debajo de lo esperado, lo cual supone una presión sobre el Comité de Política Monetaria. De allí es que las palabras de Powell pueden ser determinantes para el rumbo que tome el dólar durante el resto del día.

La moneda estadounidense ofrece algunos signos de debilidad ante el euro y la libra esterlina. La moneda única, sin muchos argumentos desde las noticias, se mueve en torno a 1.0800, sin poder superar claramente dicha cota. Técnicamente quebró algunas resistencias importantes, aunque será a la superación de 1.0830 cuando pueda consolidar sus ganancias y extender las mismas al resto de la sesión. De otro modo, una caída debajo de 1.0765, podría cambiar su rumbo.

La libra, en tanto, se vio favorecida por un dato de empleos de Reino Unido que ofreció cifras mejores de lo esperado. La moneda británica presenta una tendencia alcista algo más firme que la del euro, y podría extender su alza a la zona de 1.2580 durante las próximas horas.

Por su parte, el yen sigue jugando otro partido. Una vez más los movimientos en contra de la moneda nipona están haciendo sentir su poder, llevando al par USD/JPY a 156.55 en su máximo diario, del cual se ubica cerca ahora mismo. La posibilidad de una intervención por parte de las autoridades del Ministerio de Finanzas y el Banco de Japón se ve tangible para los próximos días.

La onza de oro cotiza a 2344 dólares al momento, manteniendo una tendencia alcista muy marcada en el corto plazo. El metal precioso se ha desinflado después de llegar a 2380 dólares la semana pasada, aunque mantiene un tono alcista muy marcado. El aumento, ya habitual, de los rendimientos de los bonos del Tesoro limita las chances de la onza, por lo que estimamos que no podrá superar los 2360 dólares durante las próximas horas.

Estamos, pues, ante una sesión que pondrá a prueba el ánimo eufórico de la bolsa de Nueva York que, a fuerza de malas noticias de la economía, se ve alentada por un probable adelantamiento de los recortes de tasa por parte de la Fed. El Sr. Powell, como siempre, tendrá la última palabra.

Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el miércoles.

Cae el dólar ante un débil dato de empleos

Hola Amigos, buen día. Sorpresivamente, los datos de empleo de Estados Unidos de abril quedaron muy por debajo de lo esperado. A la vez, la tasa de desempleo se ubicó en el 3.9%, por encima del consenso. El dólar cedió posiciones rápidamente, al tiempo que en la bolsa de Nueva York la mala noticia se convirtió en euforia, ante la presunción de que la Fed, por lo menos, no aumentará la tasa de interés en los próximos meses.

El ISM de servicios tampoco fue auspicioso. Y esta noticia, realmente negativa, sí impactó en la línea de flotación en Wall Street. Desde diciembre de 2009, cuando Estados Unidos aún estaba inmerso en la crisis desatada en septiembre de 2008, solo en los primeros meses de la pandemia en 2020 y en enero de 2023 la medición había quedado debajo de los 50 puntos, lo cual marca contracción del sector más importante de la primera economía del mundo.

Finalmente, cerrando la semana, las acciones terminaron al alza, con un optimismo basado en las próximas acciones de la Fed. La probabilidad de que el banco central comience con los recortes se adelantó a septiembre, de acuerdo a las últimas encuestas del día.

Este nivel de volatilidad de la bolsa se traslada, en mayor o menor medida, a las divisas. El euro oscila en un rango de precios relativamente estrecho, aunque ya lejos de sus mínimos del año en 1.0600, pero a la vez incapaz de quebrar 1.0805, línea bajista de corto plazo cuya superación podría cambiar su pálido presente.

Claro que las especulaciones acerca de recortes de tasa por parte del Banco Central Europeo también pesan, y limitan cualquier posibilidad de que el euro comience un ciclo alcista más sustentable.

Esta suerte de batalla entre bancos centrales, en la que cada uno intenta estirar sus tipos de interés lo más alto posible durante más tiempo, genera las idas y vueltas de las monedas europeas. Lo mismo que sucede con el euro ocurre, por caso, con la libra esterlina, que apenas supera 1.2600 regresa rápidamente sobre sus pasos. No está mal para operadores intra diarios; sí para los que de cualquier pequeño movimiento intentan rescatar un cambio de etapa en la historia de las monedas.

El yen luce con signos de recuperación, aunque lejos aún de la zona de peligro. La doble intervención del Banco de Japón, que inyectó en total unos 65 mil millones de dólares para defender a su moneda, le puso paños fríos a los ataques que contra la misma tuvieron lugar en las últimas semanas.

Desde hace tiempo se hablaba de una intervención en 160.00, y la misma llegó el lunes pasado. Sin embargo, nada fue suficiente y apenas conocido el discurso del presidente de la Fed, Sr. Powell, el miércoles pasado, y en medio de un alza moderada del dólar, Japón intervino para evitar mayores sinsabores.

Sin embargo, no será fácil combatir a los fondos que atacan al yen. Con la tasa de la Fed en el 5.5% y la del BoJ en 0, no hay muchas opciones a la hora de elegir. El carry trade brilla, y fue notable el desarme de varias posiciones importantes el miércoles por la tarde, cuando el euro, la libra y el dólar australiano (entre otras monedas que hoy ofrecen alto rendimiento) comenzaron a caer al tiempo que el yen se apreciaba. Los pares cruzados, de maravilla.

La onza de oro parece desinflarse por momentos. Si bien el conflicto bélico en Medio Oriente es grave y es habitual que impulse un alza de la onza, su máximo del 12 de abril en 2334 parece haber sido inducido no por una demanda normal del metal.

La impresión es que el rally del oro, iniciado a fines de febrero en la zona de 2050 dólares, fue totalmente artificial, y solo acelerado por el conflicto antes mencionado. Pero de ninguna manera hubo o hay una demanda que incentive un crecimiento de 18% en pocos días como se vio en este caso.

La segunda semana del mes tendrá a la libra esterlina como protagonista y, por añadidura, al euro. El jueves, el Banco de Inglaterra dejará sin cambios la tasa de interés en el 5.25%, apenas por debajo de la de la Fed. El comunicado posterior dejará en claro que una tasa en este nivel no es positiva para la economía británica, pero justificará en el actual nivel de inflación del 3.2% mantenerla un tiempo más.

Si las últimas noticias tienen algún efecto en la Fed lo veremos en las próximas semanas. Muchos se preguntan si en el banco central habrán tomado nota de una desaceleración de su principal medida de inflación (el deflactor conocido a fines de abril sobre el costo de vida de marzo), y de una creación de empleos que quedó muy por debajo de lo esperado, pero sobre todo muy lejos del promedio de unos 230.000 empleos que generó la economía en el último año y medio.

Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el martes.

Datos de empleo, con el dólar al acecho

Hola Amigos, buen día. Si algo hay bastante claro en los mercados es que, cuando faltan 24 horas para los datos de empleo de Estados Unidos y el dólar se mueve en una dirección, lo hará exactamente en dirección contraria apenas conocidos estos datos.

También es bastante evidente que los pronósticos suelen equivocarse en contra del dólar cuando este está en baja, y a su favor cuando esta al alza. Para la medición de abril, que se conocerá este viernes a las 8:30 del este, el consenso habla de unas 240 mil nuevas nóminas no agrícolas creadas en abril, frente a las 303 mil (sujetas a revisión) de marzo, con una tasa de desempleo que se mantendría en el 3.8%.

La caída del billete del jueves parece anticipar un movimiento en su favor este viernes. El euro se mostró zigzagueante en la víspera, y si bien visitó 1.0675, finalizó el día al alza en 1.0730, con una perspectiva ligeramente alcista de corto plazo.

La presunción de que el Banco Central Europeo podría iniciar sus recortes de tipos antes que la Fed (algo poco probable desde nuestra óptica) impactó en la moneda única, que después aprovechó la baja del dólar en todos los frentes. Sin embargo, el precio actual de 1.0741 choca de lleno contra tales pronósticos. La superación de 1.0770 podría cambiar el tono bajista imperante en el par EUR/USD aunque, claro, dependerá si ello sucede antes o después de los datos de empleo.

La libra esterlina también apunta hacia arriba, con un precio actual de 1.2568, y con tendencia alcista en el gráfico de 4 horas. La primera resistencia aparece en 1.2580, cercana al nivel actual, aunque será al quiebre de 1.2600 cuando la moneda británica pueda dejar atrás su actual tendencia bajista de corto plazo.

El yen recupera posiciones, cotizando a 153.19, después de dos intervenciones oficiales sobre su tipo de cambio, por un total -se supone- de 60 mil millones de dólares. Su actual recuperación es, por el momento, un movimiento de corto plazo, que no permite pensar en un crecimiento de la golpeada moneda nipona. Técnicamente, el par USD/JPY quebró una línea alcista en 155.00, aunque deberá apuntar al menos a 148.00, muy lejos de los niveles actuales, para convencer a los operadores de que su prolongada caída llega a su fin.

La onza de oro retrocede en estas horas, cotizando a 2301.00 dólares, con una tendencia ligeramente bajista en el gráfico de 4 horas. El quiebre de 2280 dólares, los mínimos de la semana hasta el momento, estirarán la baja del metal precioso a 2260 dólares, soporte medido por Fibonacci en el gráfico diario. La superación de 2330 dólares le dará impulso alcista al oro en la sesión americana.

Con este panorama el mercado se dispone a conocer los datos de empleo antes mencionados. A los mismos se agrega el ISM de servicios, informe clave que abarca el 80% de la economía estadounidense.

Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, y un muy buen y reparador fin de semana, nos reencontramos el próximo lunes. Hasta entonces.

Fed sin cambios (y por largo tiempo)

Hola Amigos, buen día. Como estaba largamente previsto, la Reserva Federal dejó sin cambios la tasa de interés en el 5.5% en la reunión de la víspera. En su habitual conferencia de prensa, posterior al anuncio, el presidente de la entidad, Jerome Powell, justificó la medida por la alta tasa de inflación minorista y el sólido mercado laboral. En pocos días se conocerán las cifras de ambas variables correspondientes al mes de abril.

Powell enfatizó además que harán falta al menos tres mediciones adicionales de inflación para comenzar a recortar la tasa. De esta forma se extiende al menos hasta septiembre la chance de un ciclo algo más blando en materia de política monetaria, lo cual a su vez redundará en un dólar más fuerte en los próximos meses.

Este futuro crecimiento del dólar podría potenciarse si los demás bancos centrales comienzan con los recortes. Esta posibilidad aparece lejana: en general, es la Fed la que da el primer paso, y le siguen el Banco de Inglaterra, el Banco Central Europeo (con si habitual lentitud de movimientos) y el Banco de Canadá, Australia y Nueva Zelanda.

La bolsa de Nueva York reaccionó como suele hacerlo, con un alza a la cual este jueves le puede seguir una caída de proporciones. Desde que el 1 de abril el índice Dow Jones alcanzó un nuevo máximo histórico, las acciones principales sufrieron pérdidas considerables, descontando las medidas anunciadas por la Fed.

Las monedas principales no se han mostrado especialmente volátiles luego del discurso de Powell. El euro se movió, y lo hace en las primeras horas del jueves, en un rango de precios relativamente estrecho. Parece estar a mitad de camino entre un cambio de tendencia, que tendría lugar al quiebre de 1.0735/40, y una profundización de su baja, que podría acelerar en las próximas horas, incluso visitando y quebrando sus mínimos anuales en 1.0600.

La libra esterlina se muestra algo más vivaz. Superó, hacia arriba y hacia abajo, la zona de 1.2500 en varias oportunidades el miércoles, aunque técnicamente presenta una figura de cambio de tendencia (hombro cabeza hombro), que junto al quiebre de una línea alcista medida en el gráfico de 4 horas podría redundar en una caída considerable durante la sesión del jueves. También en la del viernes, dado que el alza que dio lugar a la figura mencionada fue relativamente lenta.

En cuanto al yen, si bien las autoridades no lo han confirmado, se puede deducir que fue intervenido el miércoles por la tarde, a posteriori de la Fed. La intervención, si es que efectivamente tuvo lugar, fue importante en la cantidad de puntos que recuperó la moneda nipona, aunque también fue efímera: de los 500 puntos que ganó, perdió 280 en tres horas, con un precio actual de 155.65, donde el par USD/JPY encuentra resistencia en el 38.2% de retroceso de la baja 160.20/152.98, mínimo del miércoles.

No hay muchas posibilidades de analizar técnicamente un par que se encuentra sujeto a la presión de fondos que atacan al yen en forma permanente, contra un banco central que lucha por defender su moneda. Llama la atención la potencia de estos fondos, que le tuercen el brazo a un banco como el Banco de Japón, una institución sobria, que ha sabido instalar al yen como un activo de refugio.

En los últimos tiempos, dejó de actuar como un activo al cual los inversores acuden ante situaciones de crisis (la última vez fue en febrero de 2022, cuando una versión finalmente infundada de una invasión de Rusia a Ucrania le dio más de 150 puntos de ganancia en minutos), para convertirse en una moneda vapuleada, maltrecha y víctima de su propio banco emisor.

Las operaciones de carry trade son visibles. El miércoles, ante la recuperación del yen, el euro y la libra se desbarrancaron por largos minutos, ante la salida de algunas de estas posiciones.

La renuencia a aumentar la tasa de interés por parte del BoJ (justificada en una deuda gigantesca) ha hecho demasiado grande la brecha con el resto de los bancos centrales, que estiran al máximo sus políticas monetarias agresivas. El comportamiento del yen en el futuro cercano luce imprevisible. El festivo en Japón (Día de la Constitución) tampoco lo ayuda.

Este jueves, la agenda tiene como principal atractivo las peticiones semanales de subsidio por desempleo. Sin embargo, habrá que seguir de cerca a la bolsa de Nueva York. Son demasiadas veces las que, después de un fuerte crecimiento posterior a que la Fed se mostrara inmóvil, sufrió una fuerte baja, llevando a la rastra a las monedas principales y, por supuesto, premiando al dólar.

Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el viernes.

Mercados expectantes, con la Fed y otros datos clave

Hola Amigos, buen día. La Reserva Federal dará a conocer su anuncio de política monetaria este miércoles a las 2:00 pm del este. Será el tercer comunicado del año, con un resultado similar en todos los casos: no habrá cambios en la tasa de interés, que permanecerá en el 5.5%.

No parece tan difícil esta vez anticipar las palabras que, a posteriori del comunicado, brindará Jerome Powell, presidente de la Fed. La inflación se mantuvo alta en marzo, en un reporte conocido a mediados de abril, con un mercado laboral que sigue muy sólido, y que agrega más nóminas mes tras mes. Las dos preocupaciones principales del banco central se mantienen firmes: una negativa, la inflación; la otra, positiva, el alto nivel de empleo.

No hay motivos entonces para esperar cambios en la tasa de interés, y tampoco los habrá en junio, fecha de la próxima reunión. Lo mismo sucederá en los próximos encuentros, salvo que la inflación caiga en forma sostenida y el mercado laboral comience a dar algunas señales de debilidad, lo cual es poco imaginable en estos momentos.

La bolsa de Nueva York sintió el impacto de los datos de inflación y de empleos conocidos en abril, con una fuerte baja de sus principales índices, ante la certidumbre de que la Fed no hará cambio alguno. A su vez, el dólar se mantiene firme, con el euro no muy lejos de sus mínimos anuales en 1.0599, la libra esterlina quebrando (hacia abajo) 1.2500, y el yen cerca de sus mínimos de 40 años que tocó el lunes en 160.20.

Por otro lado, la probabilidad de una tregua en el conflicto bélico en Medio Oriente está desinflando al oro, que se aleja de sus máximos históricos que tocó el 12 de abril en 2334 dólares, y al petróleo. Los futuros del WTI apuntan hacia abajo, ya lejos de los 87.10 dólares que tocó en el máximo anual el mes pasado, y amenazando con quebrar los 80 dólares.

Si la Fed mantiene el discurso de una futura política monetaria dura, como se espera, el dólar volverá a ganar terreno en todos los frentes. Llamativamente, el billete se fortaleció el martes ante las monedas principales, algo que no suele suceder en estas circunstancias. Un movimiento de este tipo podría anticipar todo lo contrario una vez conocida la decisión de la Fed, aunque una potencial baja del dólar estaría muy limitada. Todo parece indicar que tendremos un dólar fuerte por largo tiempo.

Pero el anuncio de la Fed es el último evento del día. La agenda de noticias es rebosante este miércoles, con dos datos de empleo de primer nivel: la encuesta ADP de nóminas del sector privado (como de costumbre, se espera una creación menor a la del mes anterior) a las 8:15 del este, y las vacantes de empleo a las 10:00. En el medio se conocerá el ISM de manufacturas, a las 9:45, que otra vez podría caer de los 50 puntos.

Como se ve, se trata de un inicio de mes muy agitado, pleno de informes, y con movimientos que sin dudas serán encontrados. En principio, el dólar se prepara para atacar contra todas las monedas. Eso sí, la posibilidad de una nueva intervención de Japón para darle aire al yen (se habla de una colocación de 5.5 billones el lunes para la intervención de ese día) también mantendrá en alto la atención de los operadores.

Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el jueves.

Intervención sobre el yen_ ¿Qué sigue?

Hola Amigos, buen día. En forma previsible, el yen siguió cayendo en el inicio de la semana, luego de un desplome del viernes por la tarde, que lo dejó en mínimos de 40 años. La cota de 160.20 pareció suficiente para que el Ministerio de Finanzas de Japón tomara cartas en el asunto, en medio de un día festivo en el país. La baja de más de 500 puntos (de 160.20 a 154.35) en el par USD/JPY no pareció ser, al menos por ahora, un amague de intervención más.

Es fácil explicar la caída del yen desde los diferenciales de tipos de interés entre el la Fed y el Banco de Japón. Sin embargo, durante mucho tiempo, el Banco Central Europeo se negó a aumentar la tasa mientras Powell pisaba el acelerador, y la caída del euro fue dura, pero momentánea. Desde que tocó 0.9530, su crecimiento fue inmediato y se detuvo recién en 1.1275, donde cubrió un gap que había dejado en febrero de 2022, en el inicio de la guerra de Ucrania.

La caída del yen se asemeja a la que sufrió la libra esterlina en su hora, cuando los bancos, en horario inusual, decidieron castigar al malogrado gobierno de Liz Truss llevando a la libra a su mínimo histórico en 1.0300.

Esta vez el castigo al yen tiene aspecto de movimiento especulativo, y los pronósticos que hablaban de una intervención en 160.00 tuvieron razón. Sin embargo, no parece ser una solución definitiva: técnicamente, el par USD/JPY mantiene una tendencia lógicamente alcista en todas las temporalidades, y solo el quiebre de 154.00 podría cambiar parcialmente el sesgo actual.

El Banco de Japón no ayuda demasiado. Sigue considerando que la devaluación del yen en nada afecta a la inflación, que la misma está bajo control, y que no hay motivos para aumentar la tasa de interés. Cuando el BoJ deba hacerlo, puede que sea tarde, y se tope con un camino a contramano de los demás bancos centrales, provocando una recuperación de gran porte del yen.

El resto del mercado poco ha ofrecido en la sesión del lunes. El euro logró acomodarse sobre 1.0700, aunque no puede avanzar demasiado, cuando faltan horas para que la Fed deje sin cambios la tasa de interés. Nuestra premisa de que las monedas que crecen antes de los informes importantes caen después está más vigente que nunca, y es probable que la moneda única avance unos cuantos lugares, aunque difícilmente por encima de 1.0765.

La libra esterlina también apunta al alza, con timidez y sin alejarse demasiado de 1.2550. Solo si supera 1.2620 podría marcar una diferencia a su favor, y así y todo quedará desplomada con los anuncios de la Fed.

En los últimos días creció -en nuestra opinión en forma insólita y sin fundamento- la versión de que la Fed podría aumentar la tasa de interés en la reunión de este miércoles, o en la de junio, por el aumento moderado de la inflación por consumo, dato conocido el viernes pasado.

En nuestra opinión, Powell se sacará el problema de encima hablando de una inflación muy alta y un mercado laboral sólido, sin opinar demasiado de los datos que puedan complicar la decisión del banco central, al menos hasta septiembre. Al cabo, su discurso debería estar en línea con los pronósticos pesimistas que, precisamente sobre el mercado laboral, se van conociendo mes a mes, con cifras notoriamente superiores a la hora de la publicación.

Para este martes, con el final del primer y turbulento cuatrimestre de 2024, el dólar tiene bastante por ceder. El oro podría acelerar por encima de 2365 dólares, el euro buscará 1.0730 o más, y la libra 1.2600. El yen está en manos del Banco de Japón, el Ministerio de Finanzas y de los bancos que lo han llevado a ser la moneda de peor performance en varios años.

Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el miércoles. 

Fed y empleos, las claves de la semana     

Hola Amigos, buen día. Dos eventos clave tendrán lugar esta semana. El primero de ellos es la declaración de política monetaria de la Reserva Federal, que se conocerá el miércoles 1 de mayo por la tarde. Al respecto, no se esperan cambios en los tipos de interés, por lo que la conferencia de prensa del presidente Powell será lo que acapare la atención de los inversores El segundo es el informe de empleos de abril, previsto para el viernes, con pronósticos que en los últimos tiempos estuvieron lejos de las cifras publicadas, lo cual lo torna imprevisible.

El dólar llega a esta semana, compartida en abril y mayo, nuevamente fortalecido en varios frentes. El euro inicia el lunes debajo de 1.0700, mirando hacia abajo en el corto plazo; la libra esterlina recorre un camino similar, con una sensible baja que sufrió en las últimas semanas, y que la depositó debajo de 1.2500 el viernes.

La nota principal, sin embargo, la da el yen, con una baja récord en 34 años. La caída de la moneda nipona se aceleró a última hora del viernes, para terminar en 158.25, un nivel impensado poco tiempo atrás. El Banco de Japón había anunciado que dejaría la tasa de interés sin cambios el viernes por la mañana, desatando la baja del yen, en una medida similar -o aún mayor- que la baja sufrida en la declaración anterior.

Si bien los rendimientos de los Bonos del Tesoro, acaso la principal contraparte del yen en los últimos dos años, ha crecido pero no en forma decisiva la semana pasada, y que el conflicto de Medio Oriente, que suele apreciar al yen, se mantiene vigente, la moneda de Japón se ve impulsada a la baja en forma muy extraña e inusual. La apertura del lunes, con un modesto gap de unos 60 puntos desde el cierre del viernes, no hace más que confirmar que pueden venir nuevas bajas para el yen. El mentado seguimiento del tipo de cambio anunciado en varias oportunidades por el ministro de finanzas de Japón, Sr. Suzuki, parece una broma de mal gusto. El yen ha caído más de 1700 puntos en los últimos 4 meses, y más de 3000 desde febrero de 2023.

La onza de oro mantiene un tono alcista algo más moderado en estas horas, luego del cierre de la semana anterior en 2334 dólares. El metal precioso no termina de decidirse en ir a buscar nuevos máximos históricos, que parecen atados a un agravamiento de la situación en Medio Oriente -afortunadamente algo más relajada en los últimos días- y a los bonos del Tesoro, cuyos rendimientos también actúan a contramano de la onza. El quiebre de 2365 dólares podría darle un nuevo impulso alcista al oro, mientras que debajo de 2290 dólares podría iniciar un ciclo bajista algo más pronunciado.

La agenda de la semana, como quedó antes mencionado, quedará signada por la reunión de la Fed, que finaliza el día 1 de mayo. No hay motivos para que la Fed recorte la tasa de interés en mayo, en junio y casi tampoco en septiembre, aunque ello quedará pendiente de los informes que se vayan conociendo. El escenario se abre favorable para el dólar en todos los frentes, aunque aún más ante las monedas europeas.

En cuanto a los datos de empleo, pese a algunos vaivenes, demuestran que la economía estadounidense está realmente fuerte y el sector laboral está sólido. Más allá de alguna corrección bajista, el dólar encontrará allí otro motivo para apreciarse.

Completan la agenda otros datos clave: las mediciones de manufacturas y servicios de ISM, los empleos privados de ADP y las vacantes de empleo.

Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el martes.

Yen en nuevos mínimos de varias décadas

Hola Amigos, buen día. Dentro de una cierta quietud se han desarrollado las primeras sesiones de la semana en el mercado de divisas. El euro no logra escapar a un rango de precios muy estrecho, incapaz de superar 1.0710, que es el 38.2% de retroceso de su última baja medida en el gráfico diario, pero tampoco cae de 1.0665, que abriría la puerta a una caída que lo acerque a 1.0598, mínimo anual que tocó la semana pasada.

La moneda única está atrapada entre la fuerza del dólar, que no cede ante la certidumbre de que la Fed estirará en forma indefinida su ciclo de recortes de tipos de interés, y un cierto optimismo derivado de informes de la Eurozona, conocidos el martes, que dieron cuenta de una mejora en el sector de servicios; lo propio ocurrió en Francia y Alemania.

Para las próximas horas, la superación de 1.0710 llevará al euro a la zona de 1.0735 en primer término, nivel seguido de 1.0765; a la baja, 1.0665, 1.0630 y 1.0600 serán los soportes a tener en cuenta.

En cuanto a la libra esterlina, luce recuperada respecto a los mínimos de la semana, debajo de 1.2300. Sin embargo, su sesgo bajista de corto plazo se mantiene sin cambios, a la espera de los informes de Estados Unidos, previstos para este jueves y el viernes, que serán mencionados más abajo. Si no logra superar con claridad la zona de 1.2500, la moneda británica podría buscar rápidamente 1.2400, para seguir luego a 1.2350.

El yen vuelve a dar la nota en este particular momento de los mercados. Una vez más alcanzó, en las últimas horas, un mínimo de 34 años, para llegar a 155.35, cuando queda poco más de 24 horas para que el Banco de Japón de a conocer su tasa de interés. En la reunión de abril, el BoJ aumentó, por primera vez en más de 8 años, la tasa, que permanecía en negativo, para dejarla en el 0%. Sin embargo, el yen cayó muy fuerte desde entonces, ante la presunción de que no se producirán nuevos aumentos en el corto plazo, pese a que la inflación de Tokio dio señales de subir el mes pasado. Por el momento, el yen no tiene estímulos para recuperarse con fuerza, más aún cuando los rendimientos de los bonos del Tesoro se mantienen en máximos de varios meses, y la bolsa de Tokio ofrece sus mejores guarismos históricos, correcciones mediante.

La onza de oro se mantiene estable en torno a 2315 dólares, con un ligero sesgo bajista de corto plazo. La mayoría de las materias primas ofrece un panorama similar en estas horas, a la espera de definiciones desde Estados Unidos con los datos de inflación por consumo y PBI del primer trimestre. En el caso del oro, además, se conjuga la delicada situación de Medio Oriente, que ahora salió de los titulares globales, pero que mantiene un frágil equilibrio, que puede romperse en cualquier momento. Ante una situación como tal, el oro volverá a buscar sus máximos históricos de dos semanas atrás, en 2432 dólares.

Este jueves, la publicación del PBI avanzado del primer trimestre generará un impacto de mediana intensidad en el dólar. Se espera una fuerte baja en el crecimiento de la primera economía global en el trimestre pasado, aunque en estos momentos el efecto negativo sobre el billete podría ser muy limitado.

La atención de los mercados se vuelca también al deflactor de inflación, previsto para el viernes, y a la decisión de política monetaria de la Fed, prevista para el miércoles 1 de mayo.

Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el viernes.