Wall Street festeja, las monedas se calman

Hola Amigos, buen día. Se van calmando los ánimos en los mercados después de los últimos anuncios de política monetaria de los bancos centrales. Ya descartados los temidos aumentos de tasa de interés, ahora el interrogante es saber cuando comenzarán los recortes. Las principales economías no parecen haber sufrido en demasía el impacto de los aumentos constantes de tasa, si bien los respectivos mercados laborales dan muestra de cierto agotamiento en su crecimiento.

En este contexto, el dólar se mantiene sereno en estas horas en sus crucen centrales. El euro opera en un rango de precios estrecho en la sesión europea de este miércoles, a la espera de noticias o de algún estímulo que lo haga llegar nuevamente a 1.1000. No parece fácil tan empresa. Solo la superación de 1.0980, desde el 1.0950 actual podría darle tal impulso, y el único dato previsto en la fecha -índice de confianza del consumidor del Conference Board- no es el más apropiado para ello. El quiebre de 1.0930 podría cambiar el rumbo del euro, para comenzar a buscar su línea de tendencia principal de corto plazo en 1.0885.

La libra esterlina no pudo con 1.2730 nuevamente, y se mantiene ahora lejos de tal nivel, observando una brusca caída que podría acelerarse en las próximas horas. Sin embargo, la moneda británica parece tener el camino libre para seguir avanzando en las próximas sesiones. La superación de 1.2700 será clave para ello. En cambio, una baja de 1.2700 podría provocar una aceleración de sus pérdidas de estas horas.

En cuanto al yen, se mueve en torno a 143.40, después de su dura baja del martes. El Banco de Japón dejó sin cambios su tasa de interés, como estaba previsto, y no cambió su perspectiva de corto plazo, algo que había estado sobre la mesa en las semanas anteriores. Esto provocó la caída del yen, que se detuvo en la zona de 145.00, donde técnicamente el par USD/JPY se encontró con una línea de tendencia principal medida en el gráfico diario. La dirección de corto plazo favorece al yen de cara a la sesión americana, con un primer y principal soporte en 143.00.

La onza de oro opera en la zona de 2035 dólares, con una tendencia lateral en el gráfico de 4 horas, y sin una dirección clara para el resto del día. El quiebre de 2025 dólares podría generar una baja modesta del metal precioso a la zona de 2010 dólares.

Ajena a estos movimientos, la bolsa de Nueva York sigue festejando el cambio inminente de política monetaria de la Fed, con máximos históricos que se repiten día tras día. La exageración típica de los humores del mercado no suele ser buena consejera. La situación es harto similar a la de fines de 2019, con máximos históricos diarios en todos los índices, en medio de la casi olvidada -por algunos- guerra comercial entre Estados Unidos y China. A mediados de febrero de 2020 comenzaron las grietas por la aparición de un virus desconocido que atacaba en el sudeste asiático, y el desmoronamiento llegó sobre finales de ese año, cuando el virus alcanzó Europa. No parece que algo así vaya a suceder. Pero sí es conveniente no subirse a esta ola triunfalista en máximos históricos.

Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el jueves.