Hola Amigos, buen día. Si bien el ISM de servicios quedó muy por debajo de lo esperado y en su peor guarismo en tres meses, el dólar no cayó en forma concluyente el miércoles. Las nóminas de empleo privadas quedaron apenas por encima de las expectativas, con un efecto neutro en el dólar.
La presentación del presidente de la Fed, Sr. Powell, que tuvo lugar por la tarde, dejó poco para el análisis. Aludió poco a cuestiones de política monetaria, y se limitó a explicar como ve la economía en estos meses. El funcionario reiteró que tanto el mercado laboral como la inflación se mantienen estables, justificando los dos recortes de tipos de interés de septiembre y noviembre, pero no dejó pistas claras acerca de la decisión que tomará el banco central en dos semanas.
El euro logró escapar de sus mínimos de dos años, aunque volvió a presentar movimientos lentos, con un alza que se detuvo en 1.0543. La tendencia de la moneda única se mantiene bajista en el corto plazo, y un nuevo quiebre de 1.0500 podría acelerar su baja, para buscar 1.0465 en primer término, seguido de 1.0430 y, más abajo, 1.0415, donde cubriría un gap que dejó dos semanas atrás. Cabe acotar que también al alza quedó un gap, más cercano en el tiempo, en 1.0575.
La libra esterlina, en tanto, se muestra más sólida que el euro. La moneda británica llegó a 1.2720 en su mejor precio de la víspera, y por el momento no da señales de caer en forma contundente. Técnicamente, la libra salvó su tendencia alcista del gráfico de 4 horas en una línea cuyo próximo punto de apoyo es 1.2660, y solo su quiebre cambiará el sesgo actual de la misma.
Respecto al yen, vuelve a presentar signos de fuerte volatilidad. Perdió poco más de 250 puntos en pocas horas, y solo se detuvo en 151.22, para ganar más de 100 puntos con el ISM de servicios antes mencionado. Sin embargo, el yen no parece tener mucho para ganar, y solo se sostiene por los rendimientos llamativamente bajos de los bonos del Tesoro a 10 años, al 4.19%. La zona de 151.50 aparece nuevamente como el objetivo a tener en cuenta en las próximas horas.
La onza de oro se mantiene sin cambios ante el dólar, con un estrecho rango de precios en el que se mueve cómodamente. Las Bandas de Bollinger en el gráfico de 4 horas son elocuentes en tal sentido, muy cerca de la MA de 20 velas, lo cual marca una ausencia casi total de amplitud y volatilidad del precio. La superación de 2665 dólares podría darle algún impulso alcista al metal precioso, para buscar en su caso 2690 dólares; en cambio, el quiebre de 2630 dólares podría hacerlo perder posiciones rápidamente a 2605 dólares.
Ajenos a cualquier circunstancia, los futuros del S&P 500 y el Nasdaq 100 operan en máximos históricos, que renuevan día a día. Creemos que puede producirse una corrección de mediana intensidad en los próximos días, tal vez traccionada por un dato de empleos mejor de lo esperado, informe que se conocerá el viernes por la mañana.
Para las próximas horas, solo las peticiones semanales de subsidio por desempleo pueden mover al mercado en forma moderada.
Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el viernes.