Hola Amigos, buen día. Pasado el fin de semana largo de Navidad, algunas plazas financieras importantes permanecen cerradas. Esto limita el volumen de negocios en los mercados, con un dólar que se mantiene débil en varios frentes.
El euro superó 1.1000 con fuerza, y se detuvo en 1.1040, nivel que podría superar próximamente. La moneda única tuvo uno de sus años de menor recorrido entre máximos y mínimos y ello explica el constante cambio de tendencia que se percibe en los cortos plazos: se encuentra cerca de 1.1275, máximo del año y, en cambio, si cayera de 1.0800 apuntaría a la baja.
La libra esterlina llegó el viernes a 1.2744, su cuarta marca más alta del año. El gráfico diario presenta una figura de continuación de tendencia alcista, que podría redundar, al quiebre de 1.2800, en un nuevo rally de la moneda británica. En su contra hay un dato importante: la economía de Reino Unido entra en recesión, lo que pone en duda que el Banco de Inglaterra pueda mantener su tasa de interés en el nivel actual del 5.25%.
El yen continúa en un camino -lento- de recuperación. El cierre del viernes en 142.43 sugiere que la moneda nipona aún tiene bastante para ganar en los próximos días, aún cuando los movimientos esperables son suaves. El quiebre de 141.80 le dará un fuerte impulso al yen esta semana.
Se destaca especialmente el franco suizo, que llegó a un máximo de 8 años ante el dólar. La moneda helvética cerró el viernes a 0.8556, un nivel que no tocaba desde enero de 2015, cuando el Banco Nacional de Suiza desancló, en forma imprevista, al franco del euro en un rango de 1.20 a 1.25. Se trató de una maniobra que buscó preservar al franco de la búsqueda de refugio después de que en 2011 tocara un máximo histórico en 0.7000. La sobreventa del par USD/CHF podría ponerle freno al franco, no obstante lo cual no cambiará de tendencia en el corto plazo.
La onza de oro ofrece un alto perfil, luego de llegar a 1970 dólares, cerca de sus máximos anuales de mayo en 2081 dólares, superados el mes pasado cuando llegó a 2148 dólares. El metal precioso ganó 100 dólares en muy pocos días, y la corrección bajista que esperamos por ahora aparece lejana. Cabe acotar que quedaron dos gaps sin cubrir en el oro, en 1922 y 1834 dólares.
La extrema sobrecompra de los índices bursátiles de la bolsa de Nueva York torna inminente una corrección bajista de proporciones. El rally de la bolsa se estira al máximo, como ya sucedió en otras oportunidades en los últimos años. La última vez fue en febrero de 2020, días antes de la explosión de la pandemia. Este tipo de correcciones, después de días y días de máximos históricos en los índices principales, son esperables desde lo técnico, pero no desde las noticias: nadie sabe a ciencia cierta que origen tendrán y cuando.
Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el miércoles.