Hola Amigos, buen día. Las cifras de servicios en Estados Unidos publicadas por S&P Global quedaron por encima de lo esperado el viernes, fortaleciendo a un dólar que, por ahora, no encuentra rivales entre las monedas principales.
Sin embargo, el oro logra hacer pie y, más aún, se posiciona al alza para los próximos días. El metal precioso superó nuevamente los 2700 dólares, y ya comienza a mirar, de lejos, sus máximos históricos de octubre, cuando tocó 2789 dólares.
El agravamiento de la guerra en Europa del este ha generado este nuevo movimiento alcista del oro, después de caer más de 200 dólares en pocos días. Paradójicamente, cuando cayó lo hizo por la expectativa de que el nuevo presidente de EE.UU., Donald Trump, negociaría en poco tiempo una paz sostenible en la región. Al subir, lo hace porque el conflicto se agrava: Trump asume en poco menos de dos meses.
El oro quebró varias resistencias importantes en las últimas sesiones. La próxima aparece cerca del cierre del viernes, que operó en 2714 dólares. La zona de 2730 dólares es el objetivo más próximo de la onza, y su quiebre la llevaría a 2750 dólares.
La velocidad con que se mueve es notable: las últimas 5 velas diarias fueron alcistas, y la del viernes fue la que mayor amplitud ofreció. En contra del oro se ubica el gap que dejó en 2560 dólares. Claro que hay otro, mucho más lejano, en 1834 dólares.
Respecto a las monedas, el euro llegó el viernes a mínimos de 2 años, en 1.0330. Las cifras de manufacturas en Alemania fueron muy decepcionantes, y la caída de la moneda única no se hizo esperar. De todas formas, el desplome fue muy extraño: más de 130 puntos en menos de 5 minutos por un informe que, desde antes, se esperaba negativo. Por otro lado, la amenaza que recae sobre Europa desde Rusia es motivo de preocupación, que se ve también en el precio de su moneda principal.
El euro cerró el viernes en 1.0415, y su tendencia se mantiene bajista en el corto plazo. Lejos le queda la zona de 1.0500, nivel que debe quebrar para cambiar la dinámica bajista actual en el gráfico de 4 horas y en el diario. Y si cae nuevamente de 1.0365, el mínimo del viernes ya no será soporte. Y en tal caso, 1.0280 será el nivel a seguir.
La libra esterlina, en tanto, perdió la cota de 1.2500, llegando a su mínimo desde el 14 de mayo pasado. La divisa británica perdió 950 puntos en dos meses, una caída que tiene pocos precedentes en estos años, excepción hecha del golpe de mercado que sufrió en septiembre de 2022, cuando llegó a su mínimo histórico en 1.0300. En el corto plazo, la libra no tiene mucho para ganar. El quiebre de 1.2490 la llevará al menos a 1.2455, y más abajo a 1.2420 durante la sesión del lunes. También Reino Unido siente la presión del conflicto en Europa del este.
El yen, por su parte, volvió a caer el viernes, cerrando la semana a 154.80. Muy volátil, la moneda nipona no logra estabilizarse ante la inacción del Banco de Japón en materia de tasa de interés, y ante los altos rendimientos de los bonos del Tesoro, cuyas notas a 10 años superan el 4.40%. La zona de 155.30 es el objetivo para este lunes.
La semana que comienza será corta, por el Día de Acción de Gracias (el jueves), y el Viernes Negro, en el que la actividad financiera suele ser limitada. El calendario de noticias se concentrará entre el martes y miércoles, con el deflactor de inflación en Estados Unidos como eje central. También se destacan el índice de confianza del consumidor del Conference Board, y el PBI preliminar del tercer trimestre. Cerrarán la agenda las Minutas de la última reunión de política monetaria de la Fed.
Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el martes.