Inflación por consumo: ¿Ganancias para el dólar?

Hola Amigos, buen día. El mes de octubre cierra con un dato clave, como lo es la cifra de inflación por consumo, también llamado deflactor de inflación. La medición, que la Fed menciona como una de sus claves a la hora de fijar la tasa de interés, se conocerá a las 8:30 del este, y definirá el destino del dólar en todos los frentes.

Los pronósticos hablan de un alza en el costo de vida del 0.3%, frente al 0.1% anterior, y de una baja en términos interanuales del 2.7% al 2.6%. Hay motivos para pensar que la medición mensual será la que tenga mayor impacto, y si se cumplen los pronósticos -o son superados, como creemos- el dólar se verá ampliamente beneficiado.

Algo de ello ocurrió el miércoles con las nóminas del empleo del sector privado, que quedaron en el doble de lo esperado. Sobre ello habíamos hablado el lunes, en el inicio de la semana. Con el dólar alcista, todo apunta a que los informes que se publiquen en los próximos días acompañarán el comportamiento del billete. A la vez, a informes positivos les corresponderá una moderación de la Fed a la hora de comunicar su tasa de interés en noviembre. Los mercados apuntan a un recorte del 0.25% el mes próximo.

El euro se fortaleció el miércoles luego de conocido el dato de inflación de Alemania, con cifras mayores a las esperadas. El alcance de un alza adicional del euro se ve limitado. Le costará mucho superar 1.0905, primera resistencia, y si lo hace encontrará un obstáculo aún mayor en 1.0930. No creemos que llegue a tal nivel.

El euro tiene un camino bajista por delante, que dejaría de lado solo a la superación de 1.0965, algo improbable en el corto plazo. En cambio, se cae de 1.0760 la zona de 1.0730 aparecerá rápidamente en las pantallas.

La libra esterlina cayó fuerte ante el dólar el miércoles, luego de superar 1.3040 por primera vez en varios días. La moneda británica exhibió su habitual volatilidad, y no pudo hacer frente al embate del dólar. El par EUR/GBP muestra una notable tendencia alcista, producto de la divergencia entre el euro y la libra en el corto plazo. La libra podría visitar 1.2900 durante la sesión americana del jueves.

En cuanto al yen se mantiene muy débil, a la espera de la decisión de política monetaria del Banco de Japón, prevista para la tarde de Tokio de este jueves. Se descuenta que no habrá aumentos de tipos de interés, y con el problema político desatado en Japón, el yen podría caer con fuerza durante la próxima sesión. La zona de 154.50 es lo que viene para la moneda nipona, cuando comienzan a sonar rumores de intervención.

La onza de oro vuelve a tocar máximos históricos, esta vez en 2789 dólares, a un paso de los 2800 dólares que puede buscar en las próximas horas. La extrema sobrecompra en el gráfico de 4 horas parece limitar las ganancias de la onza en las próximas horas. Sin embargo, los argumentos técnicos quedan de lado, y por ahora no hay motivos para pensar en un cambio de rumbo del metal precioso.

Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el viernes.

Euro y libra esterlina, más estables y con señales positivas

Hola Amigos, buen día. El dato de vacantes de empleo de Estados Unidos quedó muy por debajo de lo esperado, en un informe conocido el martes. Pese a que las encuesta de confianza del consumidor del Conference Board ofreció guarismos positivos, los inversores se volcaron en contra del dólar en todos los frentes.

El euro recuperó la zona de 1.0800, la libra esterlina superó 1.3000, y el yen, después de alcanzar niveles similares a sus mínimos de varios meses que había tocado la semana pasada en 153.87, logró recuperar posiciones muy modestamente.

El oro, por su parte, llegó a un nuevo máximo histórico en 2772 dólares, nivel técnicamente difícil de superar en un solo intento.

También es fuerte el crecimiento de la plata y el platino. La brecha entre el oro y la plata se ha reducido a 80 unidades, lo que da cuenta de la fortaleza de esta última, dado que el oro no se queda atrás y sigue tocando máximos históricos. En cambio, los futuros del petróleo siguen cayendo, y los 67.30 dólares que tocó el martes son una muestra de lo que le cuesta recuperar terreno, pese a que el conflicto de Medio Oriente no da muestras de terminar.

El panorama general de los mercados es complejo, con varios puntos de atención que conviene repasar. Sin embargo, la impresión es que los movimientos de los próximos días serán cautelosos, y difícilmente se produzcan cambios de tendencia importantes en los activos principales. Veamos.

Las elecciones presidenciales en Estados Unidos acaparan la atención de todos, tanto operadores como público en general. El candidato republicano Donald Trump se presenta por tercera vez consecutiva, habiendo ganado claramente en 2016, y perdido por escaso margen en 2020. Su discurso no ha variado, y las encuestas lo favorecen.

Las promesas de desregulación, de moda en diversas latitudes, es bien visto por los mercados, que premian al dólar. Los rendimientos de los bonos del Tesoro han llegado el martes a su máximo desde el 5 de julio, en el 4.33% en las Notas a 10 años.

Claro que una victoria de Trump presionaría a la Fed a recortar la tasa de interés a mayor velocidad, con la inflación bajo control. El presidente del banco central, Sr. Powell, se mostró muy flexible a la hora de cambiar de parecer respecto a como combatir la inflación. Dado que debería compartir su enorme poder con Trump durante casi un año, no caben dudas de que intentará no desentonar con el discurso del potencial presidente.

Una victoria de Kamala Harris, políticamente correcta y con el perfil justo para el voto más joven, tendría un efecto exactamente opuesto al de un mandato de Trump.

Por otro lado, el conflicto bélico en Medio Oriente parece haberse calmado por el momento, después de lo sucedido el viernes pasado. Claro que no se puede esperar que esta suerte de equilibrio dure mucho tiempo más. El efecto de un recrudecimiento de la guerra favorecerá al oro, aunque por lo visto tendría nulo efecto sobre el petróleo.

La cuestión de las tasas de interés de los bancos centrales también está en el menú. La Fed podría inclinarse por un recorte del 0.25% en noviembre, sobre todo si los próximos datos de empleo no son del todo buenos. Los pronósticos apuntan a ello, aunque en verdad son muy poco creíbles, por lo que solo resta esperar los informes ya publicados.

El Banco Central Europeo y el Banco de Inglaterra podrían recortar sus respectivas tasas es mes próximo, ampliando la brecha con la Fed. Estas medidas no favorecerán al euro y a la libra, aunque hablamos de varias semanas hacia adelante.

En este contexto, la publicación de las nóminas de empleo privadas de ADP, a las 8:15 del este, y el PBI avanzado del tercer trimestre, a las 8:30, serán claves para este miércoles. El dólar llega “averiado” a estos informes, después de las vacantes de empleo ya mencionadas, aunque su tendencia alcista de corto plazo no se verá afectada. La excepción, como siempre, la puede dar el oro; y en sentido contrario, el yen.

Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el jueves.

Datos clave para el dólar

Hola Amigos, buen día. La nota del lunes la dejó el yen, con una fuerte baja, adicional a la que ya venía sufriendo, luego de que las elecciones de Japón desataran un terremoto político en ese país. Después de varias décadas, el Partido Liberal perdió la mayoría en el Parlamento local, generando un alza del par USD/JPY, que se mantuvo durante toda la sesión de la víspera.

El cruce dejó un gap en 152.35, precio del cierre del viernes, que no cubrió totalmente, como también los dejó en los pares EUR/JPY y GBP/JPY. La firme recuperación del euro y de la libra esterlina generó un hueco de precios que, al cierre de la sesión americana del lunes, acumulaban más de 140 puntos en cada par.

El yen se ve presionado por la brecha que existe entre la tasa de interés de la Fed y la del Banco de Japón, pese a que este último la aumentó dos veces este año, pero también por la moderada baja en la inflación de Tokio, conocida la semana pasada.

A la vez, el fortalecimiento general del dólar ha afectado especialmente a la moneda nipona, que es sin duda la de peor rendimiento en los últimos tres años. Por otro lado, el aumento de los rendimientos de los bonos del Tesoro, cuyas notas a 10 años ya rozan el 4.30%, pesa decisivamente en el yen.

Por el lado del oro, no se han producido mayores novedades. Luego del recrudecimiento de la guerra en Medio Oriente, con un nuevo capítulo que tuvo lugar el viernes por la noche, la cautela con que todas las partes se han movido el fin de semana impidió que la onza supere sus máximos históricos de 2758 dólares que tocó pocos días atrás.

Sin embargo, el metal precioso se mueve muy cerca de tal nivel, y pareciera que apenas un impulso pequeño podría llevarlo por encima de dichos máximos en las próximas horas. El oro tendrá objetivo en la zona de 2780 y, más arriba, en 2800 dólares si logra quebrar sus próximos máximos.

En cuanto al euro, se mueve en torno a 1.0820, sin poder superar 1.0830, nivel que le ha resultado esquivo en las últimas sesiones. La moneda única permanece presionada por la escalada del dólar, y por la presunción de que el Banco Central Europeo volverá a recortar la tasa de interés el mes próximo, luego de dejar la tasa de referencia en el 3.40% en septiembre. La superación de 1.0850 podría darle un impulso alcista más importante al euro, en cuyo caso la zona de 1.0905 será la resistencia a seguir.

La libra se ve limitada debajo de 1.3000, sin datos importantes desde Reino Unido, pero con la certeza, por parte de los operadores, de que el Banco de Inglaterra deberá recortar la tasa en la próximas reunión, después de conocidos los débiles datos de inflación en Reino Unido de septiembre. Si logra superar 1.3020, la libra podría buscar 1.3080 durante las próximas horas.

La agenda de noticias de este martes incluye dos datos clave: por un lado, las vacantes de empleo de este mes, con un pronóstico ligeramente desfavorable para el dólar; algo similar se espera para el índice de confianza del consumidor del Conference Board, que podría quedar nuevamente debajo de los 100 puntos.

Ambos informes se conocerán a las 10:00 del este, y serán decisivos para la dirección que tome el dólar. Su baja del lunes sugiere que podría verse favorecido en el momento de las publicaciones.

Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el miércoles.

Datos de empleo y producción, listos para apuntalar al dólar

Hola Amigos, buen día. A falta de una semana para las elecciones presidenciales en Estados Unidos, los datos que se van conociendo no pueden si no favorecer a la candidata demócrata Harris. Después de dos o tres meses de dudas, las variables de empleo, servicios y crecimiento han vuelto a brillar, poniendo en duda que la Fed siga recortando la tasa de interés en sus próximas reuniones de política monetaria, previstas para noviembre y diciembre.

El dólar se ha fortalecido en gran forma ante las monedas principales, aunque no logra hacer pie frente a las materias primas. De hecho, el oro cerró el viernes a 2745 dólares, apenas 14 dólares debajo de sus máximos históricos, y la plata cotiza en niveles máximos de 12 años. La excepción, nuevamente, viene del lado del petróleo, que en los futuros del WTI apenas logra sostenerse por encima de los 70 dólares.

El euro no pudo con la zona de 1.0830 claramente y volvió a caer sobre el cierre del viernes. El gráfico de 4 horas del par EUR/USD apunta a la baja para el lunes, con indicadores que confirman tal movimiento. La zona de 1.0760, mínimos de la semana pasada, aparece como el soporte a considerar.

La libra esterlina no logró quebrar 1.3000, y también se posiciona a la baja para el lunes. La chance cierta de que el Banco de Inglaterra recorte la tasa de interés en noviembre, frente a la estabilidad que, en principio, parece tener la Fed por delante, no le dejan posibilidades de crecimiento a la moneda británica. Solo la superación de 1.3030 podría cambiar la tendencia bajista de corto plazo del par GBP/USD.

Respecto al yen, sigue cayendo y se acerca nuevamente a 153.00. En las elecciones de Japón que tienen lugar este domingo, la oposición podría quitarle al oficialismo la mayoría parlamentaria, lo cual a su vez puede complicar la acción del Banco de Japón para aumentar la tasa de interés próximamente, como los mercados descontaban dos meses atrás. A la vez, la inflación de Tokio cayó después de varios meses en un informe conocido el jueves pasado. En conjunto, todo parece apuntar a una nueva devaluación del yen, que podría limitarse solo si el Ministerio de Finanzas de Japón interviene el tipo de cambio.

El agravamiento del conflicto bélico en Medio Oriente, con un ataque de Israel a Irán que tuvo lugar el viernes por la noche, podría tener un nuevo capítulo esta semana. El oro estará pendiente de esta circunstancia, y sus máximos históricos aparecen vulnerables. La zona de 2800 dólares podría quedar en el horizonte cercano durante las próximas sesiones.

La agenda de noticias es completa esta semana. El martes se conocerá el índice de confianza del consumidor del Conference Board en simultáneo con las vacantes de empleo de octubre. Ambos datos, de alto impacto, podrían favorecer al dólar.

El miércoles se conocerán las nóminas de empleo del sector privado, a cargo de ADP. La previa habla de una baja en la creación de empleos; la experiencia nos dice que será exactamente lo contrario. También se publicará el PBI avanzado del tercer trimestre.

El jueves será el turno del anuncio de política monetaria del Banco de Japón, que dejará sin cambios la tasa de interés, dejando abierta la puerta para futuros movimientos. El yen se verá afectado negativamente, sin dudas.

Cerrando el mes, los datos de inflación por consumo serán la clave de ese día. Una vez más, el dólar se prepara para crecer con fuerza ante estos informes.

Ya en noviembre, las nóminas de empleo no agrícolas cerrarán la semana. Al igual que con el empleo privado, se espera un retroceso del empleo. Quien suscribe sospecha que las cifras serán mucho mejor de lo esperado, y mejores que las de septiembre. El último informe importante será el ISM de manufacturas.

Como se ve, comienza una semana clave para los mercados, con la atención de los operadores puestas en cada informe, y también en las elecciones del día 5 de noviembre.

Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el martes.

El euro se aleja de sus mínimos: ¿Podrá recuperarse?

Hola Amigos, buen día. En forma sorpresiva, los datos de manufacturas de Alemania crecieron por encima de los pronósticos, quedando por supuesto lejos de una zona de expansión, pero mejorando notablemente respecto a meses anteriores.

El euro, que llegó a mínimos de varios meses esta misma semana en 1.0760, logró recuperar unos 70 puntos hasta el cierre del jueves, en 1.0830. Precisamente, este precio aparece como un punto de inflexión entre su tendencia bajista dominante, que se ha formado desde mediados de septiembre, y un cambio de dirección, cuya confirmación operará al quiebre de 1.0865.

La recuperación del euro luce, pues, algo débil aún. Es verdad que en el mínimo de la semana antes mencionado el precio encontró resistencia en una línea de tendencia alcista medida en el gráfico diario, con origen en los mínimos anuales, que tuvieron lugar en abril en 1.0600. Los datos de Alemania referidos le dieron el impulso necesario para alejarse de dichos mínimos, pese a que los informes de manufacturas y servicios en Estados Unidos también brindaron cifras alentadoras.

La libra esterlina no tuvo la misma suerte. Si bien logró recuperar terreno, las cifras de manufacturas en Reino Unido fueron decepcionantes, y así la moneda británica quedó lejos de 1.3000, nivel que debe superar en primer lugar para aspirar a ganancias importantes durante las próximas sesiones. Si lo logra, 1.3040 será la siguiente resistencia, aunque su suerte parece estar atada a la del euro.

El yen también recuperó posiciones, más por motivos técnicos que fundamentales. La baja de los rendimientos de los bonos del Tesoro, cuyas notas a 10 años cotizan al 4.21% después de llegar al 4.25% esta misma semana, le dieron algo de aire a la alicaída moneda nipona, que a su vez había encontrado alivio en el 61.8% del movimiento bajista anterior del par USD/JPY en 153.25.

A favor del yen también ha operado el gobernador del Banco de Japón, Sr. Ueda, quien habló de un control sobre el comportamiento de su moneda, que ha caído más de 1300 puntos en pocos días, después de una fulminante recuperación ocurrida entre agosto y septiembre. El yen, considerado moneda de refugio, ha dejado de actuar como tal para oscilar con fuertes movimientos diarios desde el inicio de la guerra en Europa del Este.

A contramano del yen se mueve el oro en estos días, algo bastante extraño. La onza esta vez no logró alcanzar máximos históricos como en los días anteriores, aunque revirtió su caída del miércoles, para cerrar a 2736 dólares en la víspera. De esta forma, el metal precioso queda cerca de buscar dichos máximos en 2758, cuyo quiebre derivarían en un alza mucho más pronunciada en las próximas sesiones.

El conflicto en Medio Oriente es uno de los disparadores del oro, si bien en los últimos días no se han producido novedades de importancia. Su comportamiento parece obedecer, pues, a cuestiones especulativas, llamando mucho la atención su divergencia con el yen, que habitualmente marcha en la misma dirección. La baja de los rendimientos en la víspera también operó a favor de la onza.

Para este viernes, los datos de bienes durables en Estados Unidos serán las cifras a seguir en la sesión americana. La bolsa de Nueva York tomó de mal modo los datos de manufacturas y servicios conocidos el jueves, dado que presuponen una demora mayor de la Fed para recortar la tasa de interés. Algo similar podría suceder con las órdenes de bienes durables, que quedarán seguramente en línea con los informes conocidos el jueves.

Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, y un muy buen y reparador fin de semana, nos reencontramos el próximo lunes. Hasta entonces.

Agenda completa: ¿corrección bajista del dólar?

Hola Amigos, buen día. La sesión del miércoles dejó como saldo un fuerte crecimiento del dólar en todos los frentes, con un nuevo mínimo de varios meses del euro, la libra y el yen, y una corrección bajista del oro, posterior a un nuevo máximo histórico.

La bolsa de Nueva York no tuvo el mejor de sus días. Los futuros del índice Dow Jones volvieron a caer, acompañados por los del S&P500 y, en menor medida, por los del Nasdaq 100, algunas de cuyas acciones siguen tocando máximos importantes.

Si bien en los últimos días se han extendido las preocupaciones de los operadores por una hipotética demora de la Fed en los recortes de tipos de interés que comenzaron en septiembre, los movimientos de la bolsa parecen más guiados por el clima político estadounidense, a falta de apenas dos semanas para las elecciones presidenciales.

Desde la óptica de quien suscribe, la baja de las acciones no es más que una corrección anterior a un alza de gran porte, que esperamos para después de las elecciones. En las últimas horas, diversas encuestas apuntan a un triunfo de Donald Trump, el candidato preferido de los mercados, y no sería lógico que las acciones se ubiquen en máximos históricos antes de tal circunstancia.

Técnicamente, los índices de Nueva York están saliendo de zonas de sobrecompra muy marcadas, descomprimiendo las respectivas curvas de precios.

En el mercado de divisas, el euro logró salvar, sobre el final de la sesión, su tendencia alcista de mediano plazo, iniciada en los mínimos del año, que tocó en 1.0600 a mediados de abril. La formación de una línea alcista medible en el gráfico diario pone en buena posición al euro de cara a la sesión del miércoles.

La moneda única quedará lejos de sus mejores guarismos del año, en 1.1213, pero sí podría acercarse a 1.0900 sin dificultades, una vez que logre quebrar 1.0820, un nivel contra el cual el euro golpea una y otra vez.

La libra esterlina presenta, también en el gráfico diario, una curva de precios muy similar a la del euro. Después de rozar 1.2900, en un mínimo que no tocaba desde mediados de agosto, cerró el miércoles en 1.2927, muy débil aún, pero técnicamente bien armada para comenzar a recuperar posiciones en las próximas horas. El par GBP/USD tocó una línea alcista en el gráfico diario, desde la cual ha comenzado un rebote que puede llevar a la moneda británica de regreso a 1.3000 próximamente.

En cuanto al yen, volvió a caer, sin que sea ya una sorpresa. La especulación en contra de la moneda nipona, con una poco clara quietud por parte del Banco de Japón, determinó la fuerte caída que sufrió en la víspera, que se detuvo en el 61.8% de retroceso del movimiento que lo había hecho recuperar desde sus mínimos de 38 años, a mediados de julio, hasta 139.40 a principios de agosto. Esta resistencia podría ser suficiente para detener su caída en el corto plazo, por lo que el yen tiene todo dado para apuntar a la zona de 150.00 durante las próximas sesiones.

El oro, por su parte, tocó un nuevo máximo histórico antes de retroceder con fuerza en la tarde de Nueva York. La onza quedó a un paso de los 2700 dólares, con una formación de vuelta en un día que anticipa una corrección bajista posterior. Por otra parte, la extensión de su último movimiento alcista coincidió en un 100% en el máximo del día en 2758 dólares. El primer soporte se ubica en la zona de 2700 dólares, seguido de 2670 dólares para el resto del día.

La agenda de noticias incluye datos clave, los más importantes de la semana. Las cifras de manufacturas y servicios de S&P Global de la Eurozona, Alemania y Reino Unido le darán movimiento al euro y a la libra esterlina durante la sesión europea.

Las mismas cifras, en Estados Unidos, a las 9:45 del este, serán las que definan el destino del dólar, que esta vez, al menos desde un punto de vista técnico, podría ser vencido por primera vez en varios días.

Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el viernes.

El dólar acelera y envía al euro a mínimos de varios meses

Hola Amigos, buen día. Las distintas posturas de los bancos centrales respecto a sus próximas acciones de política monetaria están fortaleciendo al dólar en buena forma ante las monedas principales.

Los datos conocidos en Estados Unidos desde mediados de septiembre hasta la fecha dan cuenta de un sólido crecimiento de la primera economía del mundo, lo cual anticipa que la Reserva Federal demorará más de lo esperado sus recortes de tipos de interés.

Algunos funcionarios del banco central ya hablan de mantener la tasa sin cambios en noviembre, después de un recorte del 0.5% que tuvo lugar el mes pasado.

Esta postura contrasta con los recortes sucesivos del Banco Central Europeo (el último fue la semana pasada y dejó la tasa de referencia en el 3.40%, reflejando el apuro de la Sra. Lagarde y su Comité por evitar una crisis económica en la Eurozona), y del Banco de Inglaterra, que ya inauguró sus recortes dos reuniones atrás, para dejarla al mismo nivel que la Fed, en el 5%. En el caso del BoE, los últimos reportes de inflación no le dejan mucha opción: deberá recortar fuerte en noviembre, con un costo de vida que, en términos interanuales, ya está por debajo del objetivo de la entidad que lidera el Sr. Bailey.

Esta situación lleva a los rendimientos de los bonos del Tesoro a máximos de varios meses, por encima del 4.2% en las notas a 10 años, dejando desguarnecido al yen, que otra vez se ubica en mínimos de fines de julio.

En otras palabras, la situación se puede sintetizar mencionando que el mal trago que dejaron los datos de empleo y manufacturas de julio en Estados Unidos, el aumento de tipos de interés del Banco de Japón ocurrido días antes de tales informes, y el desarme del carry trade del vapuleado yen ante otras monedas ya quedó neutralizado. Más resumido aún, todo lo que pasó en agosto, septiembre y parte de octubre quedó borrado de los mercados, y las monedas principales operan en niveles de inicios de agosto.

El que no para es el oro. Lejos de los rendimientos de los bonos, de las tasas de interés y del ataque del dólar, la onza alcanzó, desde el 20 de agosto (dos meses atrás o unos 45 días hábiles) nada menos que 15 veces un máximo histórico.

Normalmente el oro y el yen van en la misma dirección; esta vez lo hacen en dirección contraria. El carry trade no aplica en este caso, al menos por diferenciales de tipos de interés, porque el oro no los tiene. Pero es bueno analizar esta circunstancia.

Al oro lo siguen de cerca la plata, en máximos de 12 años, y el platino, en máximos de 4 meses. En cambio, el petróleo ha quedado rezagado, lejos del ruido que en su precio suelen generar los conflictos en Medio Oriente. La baja en la demanda global pesa más, aunque el gap que dejó en los 75 dólares (futuros del WTI) será cubierto en los próximos días.

La agenda de datos sigue siendo muy modesta, y solo el anuncio de política monetaria del Banco de Canadá podría tener efecto en los pares del Loonie. El resto del mercado mantendrá este miércoles un comportamiento similar al de la víspera: un dólar fuerte, sin muchas fisuras, con el euro intentando no perder ahora la zona de 1.0800, con la libra que buscar acomodarse sobre 1.3000, y el yen penando por las continuas maniobras de los bancos y los fondos, sin que su banco emisor, el Bank of Japan, de alguna muestra de incomodidad.

Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el jueves.

El dólar ataca; Wall Street se toma un respiro

Hola Amigos, buen día. El dólar volvió a ganar posiciones en todos los frentes el lunes, con el euro y el yen en mínimos que no tocaban desde inicios de agosto, y la libra cerca de quebrar sus mínimos de varios meses que tocó la semana pasada en 1.2973.

La bolsa de Nueva York cerró a la baja en la víspera, anticipando un alza del billete, que se vio impulsado por varios factores. Uno de ellos, conocido, el conflicto en Medio Oriente, que por momentos amenaza con extenderse a otras latitudes. Otro, en la misma línea, involucra a China y Taiwán. La segunda potencia global mantiene una fuerte presión en la zona, preocupando a los mercados.

La baja en los índices principales en Wall Streeet no impidió que algunas acciones alcance máximos históricos en la víspera. Los mercados están pendientes de las elecciones presidenciales, que tendrán lugar en dos semanas, y en las que los candidatos Harris y Trump no logran sacarse ventajas en las encuestas.

La corrección bajista en Nueva York acercó a los futuros del índice Dow Jones a un gap que dejó el día 16 de octubre en 42735 puntos, próximo a cubrir. Por dicho nivel pasa, además, la línea de tendencia principal en el gráfico de 4 horas, cuyo quiebre cambiaría el destino del selectivo para los próximos días.

La presunción de que la Fed no podrá avanzar con sus recortes de tipos de interés tal como parecía previsto, dejando la misma en orden al 4.25% a fin de año mantiene a los mercados con cierta tensión. Sin embargo, por ahora se trató de una suerte de toma de beneficios del movimiento alcista anterior.

El euro cerró el día a 1.0812, con una marcada tendencia bajista en el gráfico de 4 horas, pero también con claros signos de sobreventa en el corto plazo, lo que sugiere que podría recuperar posiciones durante la sesión del martes.

Algo similar ocurre con la libra esterlina. La moneda británica cedió todas sus ganancias desde el jueves pasado, para terminar cerca de sus mínimos del mes en 1.2984. La pendiente bajista de la libra es algo más suave que la del euro, y esto anticipa que podría seguir perdiendo posiciones en las próximas horas, al menos  la zona de 1.2950, antes de iniciar algún tipo de recuperación.

La libra se ve presionada por la posibilidad de que el Banco de Inglaterra recorte la tasa de interés a mayor velocidad en los próximos meses, ante un dato de inflación de septiembre que quedó por debajo de los objetivos de la entidad, fijados en el 2% anual. La medición arrojó un 1.7% medido en forma interanual.

El yen vuelve a caer en forma vertical, siendo, una vez más, la moneda más afectada por el alza del dólar. Esta vez se detuvo recién en la zona de 150.90, ante un fuerte crecimiento de los rendimientos de los bonos del Tesoro, que llegaron al 4.19% anual el lunes, impulsados por las dudas acerca de las próximas acciones de la Fed. La moneda nipona no encuentra un piso cierto, y podría caer nuevamente en la fecha, al menos hasta la zona de 152.00.

En cuanto a la onza de oro, se muestra muy volátil, y tocando máximos históricos a diario. El lunes alcanzó la nueva marca de 2740 dólares, para caer fuerte durante la sesión americana, a tono con el fortalecimiento general del dólar. Su corrección bajista no afecta su dirección al alza de corto plazo, la cual solo quedaría en peligro al quiebre de 2700 dólares. Por el momento, parece prepararse para seguir tocando récords, aunque su sobrecompra en los gráficos de 4 horas y día parecen limitar sus ganancias para este martes.

Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el miércoles.

Dólar fuerte, pero con algunas dudas

Hola Amigos, buen día. El dólar mantiene el dominio en el mercado de divisas, con el euro lejos de sus mejores guarismos del año, y debajo de 1.0900. La libra apenas logra sostenerse por encima de 1.3000, y el yen toma algo de aire, pero sin dar señales positivas.

La economía estadounidense volvió a dar signos de fortaleza este mes, apenas días después de que la Fed recortara su tasa de interés al 5%, ante el peligro de que una tasa muy alta generara una recesión.

Los datos de empleo primero, y los sólidos reportes de servicios y ventas minoristas luego, todos correspondientes a septiembre, hacen pensar en una pausa en los recortes por parte del banco central en su reunión del mes próximo. A la vez, la inflación del mes pasado apenas cedió en términos interanuales, y creció en la medición mensual, reforzando la idea de que la Fed deberá pensar muy bien antes de recortar en las próximas reuniones.

La excepción en esta escalada del dólar viene de la mano del oro. El metal precioso sigue tocando máximos históricos a diario, con un cierre de 2721 dólares del viernes.

La onza presenta una tendencia alcista muy marcada en todas las temporalidades, pero ya está brindando señales de agotamiento de cara a las próximas sesiones. El quiebre de 2700 dólares podría provocar un retroceso de mayor tenor para el resto de la semana.

En tanto, la bolsa de Nueva York sigue festejando las cifras de la economía, pero sobre todo festeja por anticipado una victoria de Donald Trump en las elecciones del mes próximo. Si bien las encuestas entre Trump y la Sra. Harris, candidata demócrata, no dan ventajas decisivas para el republicano, los operadores mantienen un optimismo que conviene tomar con mucha cautela.

Volviendo a las monedas principales, el recorte de tipos de interés del Banco Central Europeo no tuvo un efecto tan marcado en el euro. La moneda única llegó a 1.0800 en sus mínimos de varios meses, y abre la semana en torno a 1.0860, con una fuerte tendencia bajista de corto plazo. Solo el quiebre de 1.0930, lejos del precio actual, podría cambiar su dirección bajista para el resto de la semana.

En buena parte, ello dependerá de los datos de manufacturas y servicios de la Eurozona y Alemania, que se conocerán el jueves, siendo los más importantes de la semana.

Los mismos informes, pero en Reino Unido, pueden determinar el destino de la libra esterlina. Pocas semanas atrás llegó a su máximo del año por encima de 1.3400, para perder rápidamente posiciones ante los informes de inflación de septiembre, que quedaron por debajo de lo esperado, en el 1.7% interanual. Esta cifra anticipa que el Banco de Inglaterra también deberá actuar.

Por último, el yen volverá a estar bajo presión esta semana, con los rendimientos de los bonos del Tesoro al alza, y el Banco de Japón enviando señales difusas. La zona de 150.00, ya vencida, será el objetivo a seguir. Si logra superar 147.00, el yen tendrá una nueva chance de recuperación.

Precisamente, la agenda de datos de manufacturas y servicios de S&P Global en Estados Unidos, que también se conocerán el jueves, serán los que definan la dirección del billete para los últimos días del mes.

Con un calendario modesto, los primeros días de la semana servirán para consolidar la tendencia actual del dólar en prácticamente todos los frentes.

Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el martes.

Oro en nuevos máximos históricos

Hola Amigos, buen día. La onza de oro volvió a tocar máximos históricos el jueves, y mantiene un alto perfil en las primeras horas del viernes. El metal precioso alcanzó la cota de 2713 dólares en la sesión asiática de la fecha, y por el momento no brinda signos de agotamiento, salvo por la sobrecompra apreciable en los gráficos de corto plazo.

La onza había iniciado su actual rally en octubre de 2023, al inicio de la guerra en Medio Oriente, tocando varias veces marcas históricas. En los últimos meses, sin embargo, se había mantenido expectante en torno a los 2650 dólares, afectado fundamentalmente por los rendimientos de los bonos del Tesoro, cuyas notas a 10 años se muestran especialmente volátiles.

Por otro lado, la compra masiva de oro por parte de los bancos centrales, en especial el Banco Popular de China, han impulsado a la onza en estas últimas semanas. Por supuesto, el agravamiento de la situación en Medio Oriente también tiene peso propio en el movimiento del oro.

La onza aparece como una excepción dentro del dominio general del dólar ante los activos principales. El billete volvió a tomar fuerza en la víspera ante un dato de ventas minoristas que, como era de prever, quedó muy por encima de lo esperado en septiembre.

Desde mediados del mes pasado, todas las referencias importantes en Estados Unidos apuntan a un dólar fuerte. Los pronósticos de los informes principales siempre quedan subvaluados respecto a las cifras oficialmente publicadas, y de esta manera el dólar vuelve a apuntar alto frente a las divisas líderes.

No extraña, entonces, ver al euro luchando por no perder la zona de 1.0800. Una y otra vez, la moneda única visita la zona de 1.0820, un nivel que parece dejarla en equilibrio desde varios años atrás. Así como en los primeros años del siglo la zona de 1.1500 era recurrente, desde 2015 a la fecha 1.0800 parece ser el nivel que le queda cómodo al euro.

El previsible recorte de tipos de interés por parte del Banco Central Europeo decretado el jueves no tuvo demasiado efecto, dado que estaba descontado por los mercados. También lo estaba el discurso posterior de Christine Lagarde, líder de la entidad, que en los últimos tiempos ha tomado una postura particular: recortar, pero suavizar el discurso.

Con todo, el euro no está lejos de sus máximos del año en 1.1213, pero tampoco de sus mínimos de 1.0600. Al cabo, se trata del año en que menor fluctuación ha tenido la moneda europea frente al dólar, producto de diversos factores. Entre ellos, una cierta alineación de la política monetaria del BCE y la Fed que, con diferencia de semanas, van actuando en la misma dirección. En este sentido, la Fed ha hablado más de lo que hizo, al menos por ahora.

La libra esterlina también atraviesa horas delicadas. Ya ha perdido la zona de 1.3000, por primera vez en tres meses, y pese a que muestra signos de recuperación, los datos de inflación de Reino Unido de septiembre anticipan recortes del BoE en los próximos meses. La zona de 1.2800 aparece en el horizonte para la moneda británica.

El yen vuelve a caer, tal como ha sucedido en los últimos dos años, con una velocidad inédita en una moneda tradicionalmente estable y considerada activo seguro. Ha dejado de serlo, sin dudas, ante la inacción del Banco de Japón, que ha permitido un ataque especulativo por parte de bancos y fondos de inversión.

Esta vez, el carry trade no es visible ante otras monedas como sí lo era en los primeros meses del año frente al dólar australiano, pero el efecto sobre la moneda es el mismo. Ya está quebrando 150.00, con el BoJ enviando señales difusas (confusas mejor dicho) respecto a las acciones que tomará ante una inflación en máximos de muchos años en Tokio.

El yen luce como una moneda totalmente desguarnecida, sin defensas por parte del BoJ, y se parece demasiado a las monedas de países tercermundistas, en los que la política monetaria suele ser errática y sin rumbo definido.

Este viernes, la ausencia de datos macro de importancia hará que los mercados se muevan al ritmo de la bolsa de Nueva York. En Wall Street volvió la euforia, en parte por los datos conocidos este mes en Estados Unidos, y en parte por lo que los operadores consideran un hecho: la victoria de Donald Trump en las elecciones de noviembre.

Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, y un muy buen y reparador fin de semana, nos reencontramos el próximo lunes. Hasta entonces.