El oro, en su mejor momento

Hola Amigos, buen día. La onza de oro volvió a quebrar su propio máximo histórico del 20 de agosto de 2532 dólares, para alcanzar los 2560 dólares a última hora del jueves. El nuevo nivel parece fácilmente vulnerable.

El oro podría tocar 2585 dólares durante las próximas horas, sin que por ahora se vean signos de debilidad en su movimiento actual. La lateralización que presentó en las últimas sesiones le quita, incluso, el riesgo de ingresar en sobrecompra en el corto plazo.

En medio de una semana repleta de informes importantes, el metal precioso aprovechó los nuevos signos de debilidad del dólar y la nueva baja de los rendimientos de los bonos del Tesoro. Las notas a 10 años pagan un 3.63%, apuntando a la baja.

La proximidad de la reunión de política monetaria de la Fed, que tendrá lugar el próximo miércoles, agita los ánimos en los mercados. Se descuenta un recorte de tipos de interés, que en principio sería del 0.25%. Durante las últimas semanas hubo especulaciones acerca de un recorte del 0.5%, aunque los datos conocidos esta semana y la anterior no fueron tan negativos como se esperaba.

Esta vez, el disparador de la baja del dólar fue la cifra de inflación mayorista de agosto en Estados Unidos. Si bien la medición quedó por encima de lo esperado el mes pasado, en términos interanuales quedó en el 1.7%, debajo de los objetivos de la Fed del 2%, y del 1.8% pronosticado.

Después de algunas horas con dudas, Wall Street festejó las cifras, que prácticamente garantizan el recorte de tipos de la Fed. Los futuros del índice Dow Jones se acercan a sus máximos históricos del 29 de agosto, como también lo hacen los futuros del S6P 500.

Tal fue la debilidad del dólar, que el euro logró acercarse nuevamente a 1.1100, pese a que horas antes el Banco Central Europeo recortó la tasa de interés del 4.25 al 3.65%. El recorte fue el más importante desde octubre de 2008, cuando en medio de la crisis financiera de ese año todos los bancos centrales aceleraron la baja de la tasa de interés, para quedar en cero poco después.

Los argumentos para tal recorte parecen bien fundados. El crecimiento de la Eurozona luce frágil, como lo muestran los datos de manufacturas del bloque, y en especial los de Alemania. A la vez, la inflación se ve controlada, en orden al 2.5%, no lejos del 2% que la Sra. Lagarde definió como “inflación simétrica”, y que por varios motivos nunca pudo alcanzar.

El euro podría acelerar su recuperación por encima de 1.1100 próximamente, aunque está lejos de sus máximos del año en 1.1200. Si bien solo son 100 puntos, conviene revisar la estrecha amplitud de precios del par EUR/USD desde inicios de 2024: tan solo 603 puntos. En los primeros años del siglo esa era la cantidad de puntos que movía… por semana.

La libra esterlina también ofrece signos positivos. Después de tocar 1.3000 el miércoles, ganó 140 puntos en pocas horas, pese a algunos datos conocidos en Reino Unido poco alentadores. La tendencia del par GBP/USD se mantiene alcista, y puede acelerar sus ganancias a la zona de 1.3180 durante la sesión del viernes.

Respecto al yen, se posiciona cerca de 141.00, en un camino de recuperación al cual, de todas formas, le queda mucho por andar. Solo el quiebre de 140.40, 61.8% del último rally del dólar medido en el gráfico semanal, podría darle un mayor impulso al yen, para buscar en su caso 139.50. Difícil será que esto suceda este viernes.

El índice de confianza del consumidor de la Universidad de Michigan, a las 10:00 del este, será el dato clave del viernes. Ya en la mañana del sábado, el índice de producción industrial en China, que ofrecerá cifras débiles, puede impactar de lleno en el petróleo y en varios metales en la mañana del lunes.

Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, y un muy buen y reparador fin de semana, nos reencontramos el próximo lunes. Hasta entonces.

Fuerte expectativa por el Banco Central Europeo

Hola Amigos, buen día. El Banco Central Europeo prepara un anuncio importante para este jueves, como lo es un recorte del 0.6% en su tasa de interés de referencia, que quedaría en el 3.65% frente al 4.25% actual.

La medida, largamente esperada por los mercados, llega después de una reunión sin recortes -la de julio- pero con una baja en la tasa que ya había tenido lugar en junio, después de un largo período con los tipos al 4.5%.

Al anuncio, previsto para las 8:15 del este, le seguirá una conferencia de prensa a cargo de la titular de la entidad, Christine Lagarde, quien explicará los fundamentos de la decisión. La funcionaria ha mantenido un tono mesurado en sus últimas presentaciones, generando movimientos moderados del euro, algo que no sucedía con sus predecesores.

El euro llega a esta instancia con algunas dudas. Luego de alcanzar 1.1200 en su máximo de más de un año, sufrió una baja considerable a 1.1000, que tocó en la víspera luego de los datos de inflación de Estados Unidos.

Es evidente que un recorte importante por parte del BCE va a impactar negativamente en su precio, teniendo en cuenta que la Fed planea recortar su tasa el miércoles próximo, pero solo en un 0.25%, por lo que la brecha entre los tipos de ambos bancos centrales volverá a ampliarse.

El quiebre de 1.1000, que luce inminente, podría llevar al euro a la zona de 1.0965 en una primera instancia, soporte seguido por 1.0930. En cambio, la superación de 1.1040 le devolvería algo de fuerza a la moneda única, para comenzar a buscar 1.1100 durante las próximas horas.

Hablábamos antes de los datos de inflación de Estados Unidos, que quedaron casi en línea con lo esperado. Si bien el costo de vida en términos interanuales cayó debajo de lo esperado, el de agosto creció al 0.3%, frente al 0.2% de los pronósticos.

La sensación que quedó es que estos números alcanzarán para que la Fed recorte su tasa el próximo miércoles, pero no en un 0.5% como se esperaba a inicios de agosto, sino solo en un 0.25%. A la vez, se espera que el banco central tome el mismo temperamento en las dos reuniones que siguen hasta fin de año. De este modo, la tasa podría cerrar 2024 en el 4.75%.

El dólar se ha fortalecido en las últimas horas ante esta posibilidad, empujando al euro a los mínimos mencionados, y llevando a la libra a 1.3000, un nivel que no tocaba desde varias semanas atrás. A la vez, el yen, que había llegado a 140.80 el miércoles (cubrió un gap que había dejado en 140.80 el 28 de diciembre pasado), cae ligeramente, cotizando a 142.70 al momento.

La agenda de noticias de este jueves incluye, además de los anuncios del BCE, el índice de precios de la producción, a las 8:30 del este. Al igual que el índice de inflación minorista, el dato podría tener un alto impacto en los mercados. Excepción hecha del euro, que depende de sí mismo este jueves, el resto de las monedas se verá afectado por un dólar que, en principio, podría volver a crecer en sus principales cruces.

La libra podría visitar nuevamente 1.3000, e incluso quebrar tal nivel, para buscar en su caso 1.2970 como siguiente soporte.

El yen tiene en 143.70 su próxima parada bajista, aunque la semana próxima podría volver a crecer, si bien deberá superar 140.45, un firme soporte de difícil quiebre.

El oro busca, sin éxito, superar 2531 dólares, sus máximos históricos del 20 de agosto. Cualquier noticia que no favorezca al dólar, y una baja en los rendimientos de los bonos del Tesoro, serán motivos suficientes para que supere tal nivel.

Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el viernes.

Datos de inflación, definitorios para la Fed

Hola Amigos, buen día. Este miércoles, a las 8:30 del este, se conocerán los datos de inflación de Estados Unidos de agosto, los cuales son esperados ansiosamente por los mercados.

La presunción de que la Reserva Federal recortará la tasa de interés la semana próxima acentúa la atención de los operadores. Una medición por debajo de lo esperado acelerará el ritmo de recortes, que puede llegar al 0.5%, en tanto unas cifras similares a los pronósticos, o por encima de los mismos, cambiará la decisión del banco central, para recortar apenas un 0.25%.

Los análisis previos hablan de una baja del costo de vida en la medición general al 2.6% desde el 2.9% de julio. La medición subyacente, que excluye alimentos y energía, quedaría en el 3.2%, lejos de los objetivos de la Fed.

La probable baja de la medición general obedece a los precios deprimidos de la energía. El petróleo sigue cayendo este mes, y salvo que comience a recuperarse desde estos días, es probable que motive una baja adicional de la inflación general en septiembre. También el gas natural se mantiene débil, cerca de los 2 dólares, poniendo límites a la inflación.

El pronóstico, como se ve, no es tan positivo si se toman las variables que dependen de la Fed, que son todas menos alimentos y energía. La dura política monetaria actual estancó a la inflación por encima del 3% actual, y será necesario esperar varios meses para que ceda del 3%. El objetivo es del 2% anual.

El dólar se fortaleció entre el lunes y el martes ante las monedas principales. El euro ya está cerca de 1.1000, y podría recuperarse en la sesión de este miércoles, aunque no tiene mucho que festejar: el jueves, el Banco Central Europeo recortará la tasa de interés del 4.25 al 3.65% de acuerdo a los pronósticos, y la moneda única podría sufrir una dura baja.

La libra esterlina se mantiene algo más firme ante el dólar, en la zona de 1.3080, a la espera de una batería de datos de Reino Unido, entre los cuales se destaca el índice de producción industrial. La superación de 1.3140 podría darle a la libra un nuevo impulso alcista, aunque le costará buscar sus máximos anuales de 1.3260.

En cuanto al yen, sigue presentando una volatilidad inusual para una moneda de su solidez. Sus alzas y bajas constantes, muy amplias, lo tornan inoperable en los cortos plazos. La fuerte baja de los rendimientos de los bonos del Tesoro de Estados Unidos, cuyas notas a 10 años llegaron a mínimos de inicios de junio de 2023, ponen en buena posición al yen para seguir avanzando en su camino de recuperación, después de varios años de bajas constantes, que llegaron en julio a mínimos de 38 años. El quiebre de 141.60 generaría un movimiento favorable a la moneda nipona, que podría alcanzar 140.50 próximamente.

La onza de oro vuelve a acercarse a sus máximos históricos del 20 de agosto en 2531 dólares, contra los cuales impacta en forma constante. Si el dólar cae abruptamente, la onza tendrá una excelente oportunidad de quebrar dichos máximos este miércoles.

Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el jueves.

El dólar se recupera antes de los informes de inflación

Hola Amigos, buen día. La sesión del lunes no dejó demasiado para el análisis. La presunción de que la inflación de agosto quedará debajo de la medición de julio, y probablemente debajo de los pronósticos, se mantiene en el ambiente y, como suele ocurrir, el dólar toma una dirección contraria a tal presunción.

La vieja máxima de “comprar con el rumor, vender con la noticia” aparece nuevamente en el aire, por lo que este martes el billete podría estirar sus ganancias ante las monedas principales y el oro.

Técnicamente, el euro encontró soporte, una vez más, en la zona de 1.1030, nivel que aparece vulnerable en estas primeras horas del martes. El ya descontado recorte de tipos de interés por parte del Banco Central Europeo podría debilitar a la moneda única en las próximas horas, aunque la incógnita está puesta en el discurso posterior al anuncio, por parte de la líder Christine Lagarde.

Si bien el recorte previsto es importante (un 0.6% desde el actual 4.25%, que dejaría los tipos en el 3.65%), no se sabe si este temperamento del BCE se mantendrá en las próximas reuniones hasta fin de año (quedarán dos excluyendo la del próximo jueves), o la tasa quedará sin cambios desde entonces.

La inflación de la Eurozona se mantiene estable, cerca de los objetivos del 2%, pero con la actividad económica que da signos de debilidad, en especial en la primera economía del bloque, la de Alemania. Las palabras de Lagarde, que de todas maneras suele evitar grandes oscilaciones de precios, serán la clave.

Antes, el euro puede seguir cayendo, y la zona de 1.1005 aparece como el primer soporte a seguir. Debajo del mismo, 1,0965 será el siguiente objetivo. No esperamos una recuperación importante de la moneda europea, más allá de 1.1080.

La libra esterlina también brinda signos de debilidad en estas horas, con un precio de 1.3069, mínimo que no tocaba desde el 21 de agosto pasado. Lejos quedan sus máximos anuales de 1.3260 que tocó hace pocos días, y no parece que vaya a acercarse a los mismos en las próximas horas.

En cuanto al yen, retrocede desde niveles cercanos a sus máximos del 5 de agosto en 141.55, que estuvo a punto de tocar el viernes y en la apertura del lunes. La presunción de que el Banco de Japón seguirá aumentando la tasa de interés en forma paulatina, y de que la Fed hará lo contrario, favorece a la moneda nipona de cara a las próximas semanas.

Los rendimientos de los bonos del Tesoro, que suelen ir a contramano del yen y el oro, el lunes se mantuvieron estables, con una ligera recuperación, limitando justamente al yen, y manteniendo casi sin cambios al oro.

La onza intenta no perder la cota de 2500 dólares, aunque técnicamente presenta una formación de triple techo medida en el gráfico de 4 horas que podría anticipar una caída. Para ello, el precio deberá quebrar la zona de 2470 dólares.

El calendario de la sesión americana del martes es modesto, y la atención del mercado ya se fija en los datos de inflación de agosto, que se conocerán el miércoles a la mañana. Allí se definirá el destino del dólar para varios días.

Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el miércoles.

Inflación y BCE, las claves de la semana

Hola Amigos, buen día. Los datos de empleo de Estados Unidos dejaron un sabor agridulce en los mercados. La revisión de julio empeoró los débiles datos de ese mes, en tanto las cifras de agosto, sensiblemente mejores, quedaron por debajo de lo esperado. La tasa de desempleo quedó en el 4.2%, en línea con los pronósticos.

El dólar mostró, como era de esperar, un comportamiento errático ante las publicaciones. La bolsa de Nueva York sufrió una baja importante en sus índices principales, y el billete aprovechó para no perder tanto terreno frente a las divisas principales.

Así, el euro cerró la semana debajo de 1.1100, puntualmente en 1.1085, con una perspectiva por ahora alcista en los gráficos diarios, pero con algunos indicios de que, si no supera rápidamente 1.1200, podría caer con fuerza durante las próximas sesiones.

Hay motivos para pensar en ello. El Banco Central Europeo dará a conocer su anuncio de política monetaria el jueves, y se espera un fuerte recorte en la tasa de interés, que quedaría en el 3.65%, frente al 4.25% actual. Este recorte ampliaría la brecha existente con la tasa de la Fed, actualmente en el 5.5%, pese a que los mercados descuentan un recorte del banco central en la reunión del 18 de septiembre.

Los datos conocidos en Europa en los últimos días no dan motivo para que el euro crezca en forma concluyente. Los datos de manufacturas de Alemania, y de la Eurozona en general, se mantienen débiles, en tanto la inflación amerita un recorte de tipos como el que planea la Sra. Lagarde y su Comité.

Es probable que veamos al euro estable en estos días, a la espera de tal anuncio, aunque su suerte parece más vinculada a los avatares que atravesará el dólar.

La libra esterlina, en tanto, sufrió una baja importante el viernes, posterior a los datos de empleo de EE.UU. Los 125 puntos de amplitud entre su máximo y mínimo diario ponen de manifiesto que sus ganancias de las últimas semanas no han sido sustentables y que, al igual que el euro, su destino está atado al comportamiento del dólar. El quiebre de una línea alcista medida en el gráfico de 4 horas en 1.3180 fue concluyente, y la divisa británica puede buscar 1.3000 próximamente.

El yen mantuvo su camino de recuperación, y se detuvo en 141.75, donde encontró el par USD/JPY encontró soporte en una línea de velocidad alcista en el gráfico diario. No obstante, el yen podría extender sus ganancias en las próximas sesiones, y la zona de 140.00 aparece nuevamente en el horizonte cercano. El discurso agresivo del gobernador del Banco de Japón, Sr. Ueda, en el que aseguró que su entidad mantendrá sus alzas de tipos de interés en el futuro próximo, junto con los recortes de tipos de la Fed, parecen anticipar un camino bajista importante del cruce USD/JPY en los próximos meses.

La onza de oro se aleja de sus máximos históricos, aunque una y otra vez se acerca a los mismos. Todo parece estar dado para que sean superados próximamente, y el metal precioso se acerque al menos a 2560 dólares.

En buena parte, lo expuesto dependerá del dato clave de la semana, que es el índice de precios al consumidor en Estados Unidos. El informe se conocerá el miércoles, y será decisivo para el temperamento que tome la Fed el próximo día 18. Si la inflación queda debajo de lo esperado, el recorte de tipos será del 0.5%, y el dólar comenzará una lenta declinación. De lo contrario, el billete dará pelea en las próximas semanas.

Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el martes.

Mercados en vilo por los datos de empleo

Hola Amigos, buen día. Después de los datos mixtos del jueves, el informe de empleos no agrícolas de agosto acapara la atención de los inversores. El ISM de servicios en Estados Unidos conocido el jueves quedó por encima de los 51 puntos, pero unas décimas debajo de lo esperado, generando una efímera recuperación del dólar.

Sin embargo, el billete sufrió, antes de dicho informe, un verdadero mazazo, con las nóminas de empleo privadas de ADP. Si bien los pronósticos ya anunciaban una baja en la creación de empleos de este sector, la medición fue peor de lo esperado, en tanto la revisión de julio también fue a la baja.

La reacción del mercado no se hizo esperar, y el euro recuperó la cota de 1.1100, en tanto la libra se acerca a 1.3200. La moneda única había visto peligrar su tendencia alcista de corto plazo en las últimas sesiones, pero logró mantenerse a flote ante la baja general del dólar, y apunta alto para este viernes.

En tanto, la libra esterlina se mantiene expectante, cerca de 1.3200, y con su máximo anual de 1.3260 a la vista. El mismo podría ser vulnerado ante las cifras a conocerse este viernes.

La onza de oro, que se había movido erráticamente durante buena parte de la semana, también aprovechó la debilidad del billete para posicionarse en óptimas condiciones de atacar sus máximos históricos del 20 de agosto en 2532 dólares.

Por su parte, el yen llegó a un máximo de casi un mes en 142.83, aunque su gran volatilidad, atípica en una divisa líder, pero a la que comienzan a acostumbrarse los mercados en estos tiempos, lo hizo retroceder por encima de 144.00. El cierre del jueves, en la zona de 143.40, también deja en buenas condiciones de crecimiento al yen para las próximas horas.

El petróleo, en otro orden, sigue siendo protagonista, y no por buenas razones. Su caída se profundiza día a día, llegando a nuevos mínimos anuales, y apuntando ahora los mínimos de 2023 en 63 dólares, en los futuros del WTI.

Los PMI de manufacturas de China y Estados Unidos, conocidos en los últimos días, arrojaron resultados más que decepcionantes para los mercados, acentuando la baja de la materia prima ante una expectativa de demanda muy por debajo de lo esperado para estos meses.

En cuanto a las nóminas de empleo no agrícolas, que se conocerán a las 8:30 del este, la previa habla de unos 164 mil nuevos puestos de trabajo generados el mes pasado, frente a los 114 mil de julio. En principio, y si se cumplen estos pronósticos -habitualmente no lo hacen y presentan errores groseros- el dólar podría recuperar parte de sus pérdidas de esta semana. La tasa de desempleo, siguiendo estos pronósticos, podría retroceder al 4.3%. Sin embargo, estos pronósticos, y los errores groseros, siempre apuntan en la dirección del dólar del momento. Por ello, no extrañaría que la cifra quede debajo de las 100 mil nóminas, empujando aún más al billete a la baja, y confirmando los planes de la Fed de recortar su tasa de interés el 18 de septiembre.

Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, y un muy buen y reparador fin de semana, nos reencontramos el próximo lunes. Hasta entonces.

Se acelera la búsqueda de refugio: oro, expectante

Hola Amigos, buen día. La cifra de vacantes de empleo de agosto quedó en mínimos que no tocaba desde abril de 2021, cuando el mercado laboral se recuperaba después de la pandemia de 2020. El informe se sumó al ISM de manufacturas, muy negativo, y reafirma la desaceleración del crecimiento de la economía estadounidense, que ahora comienza a rozar al sector del trabajo.

Más que nunca toman vigencia las palabras del presidente de la Fed, Sr. Powell: “el tiempo de recortar ha llegado”. En verdad el tiempo ya había llegado hace mucho, con la inflación a décimas del objetivo del banco central (objetivo teórico, puesto que el propio Powell se había propuesto llevarla al 2.5% en el Simposio de Jackson Hole de 2019, y vaya si lo logró), pero recién ahora parece la Fed haberse dado cuenta que mantener una tasa de interés en el 5.5% por un año y medio es nefasto en cualquier país, y mucho más en la primera potencia global.

Powell logró, en poco menos de dos años, que las cifras de empleo lleguen a mínimos de varios años, lo mismo las vacantes de empleo, que la tasa de desempleo llegue a niveles no vistos en 3 años, que la inflación caiga a una velocidad demasiado lenta, y que tanto el sector de manufacturas como el de servicios resientan su crecimiento. A su favor solo queda el PBI, que refleja lo sucedido varios meses atrás, haya quedado por ahora en niveles aceptables, y que las ventas minoristas se mantengan medianamente estables.

Los mercados miran con desconfianza el futuro. En Wall Street, el inicio del mes fue muy negativo, algo que también es estacional (septiembre suele ser un mes complicado en Nueva York), pero que tiene que ver con el fantasma de la recesión, por ahora lejano, pero latente.

A esta preocupación se suman diversos factores, que por supuesto no tienen que ver con la Fed y su errática política monetaria, pero que mantienen en vilo a los mercados. Uno de ellos, la baja del petróleo, motivado en los débiles datos de manufacturas de China, conocidos el sábado pasado, y los de Estados Unidos antes mencionados. La baja en la demanda global opera en contra de la materia primas, en momentos en que algunos países de la OPEP+ han decidido dejar de lado los recortes de producción. Finalmente, les conviene que entren menos dólares, pero que ingresen. Los futuros del WTI llegaron el miércoles a su mínimo anual y ya cerca de los mínimos de diciembre de 2023, cuyo quiebre llevaría al precio a niveles que no toca desde junio de ese año.

El dólar se debilita en varios frentes, aunque por ahora con moderación. El euro no crece más por culpas propias que por mérito del billete. La posibilidad de que el Banco Central Europeo recorte su tasa próximamente, algo que ya hizo en junio, impide que la moneda única se escape por encima de 1.1200. Sin embargo, si la Fed amaga con recortar a razón de medio punto por reunión, es probable que el euro finalice 2024 cerca de 1.1500.

La libra esterlina sigue luciendo mejor que el euro. Su baja de estos días obedeció sobre todo a un rebote alcista del dólar, que parece haber encontrado su final. La superación de 1.3200 podría acelerar su marcha, y superar 1.3300 rápidamente. También la libra está pendiente del Banco de Inglaterra, aunque en menor medida. Con la lógica aplicada con el euro, la libra podría terminar este año por encima de 1.3500.

El yen está recuperando terreno, lejos de fortalecerse. Para ello debe superar 130.00, que por ahora se encuentra absolutamente lejos. Su movimiento alcista de estos días tiene que ver con la visión agresiva del Banco de Japón, que promete seguir endureciendo su política monetaria, lo cual provocará un choque de planetas con la Fed. La moneda nipona aún no se despertó, pero si lo hace (y técnicamente observa patrones que la ubican en 135.00 en pocas semanas), puede generar un cambio en las finanzas globales durante mucho tiempo.

Este jueves, la publicación del ISM de servicios puede ser un alivio para el dólar. La medición quedará lejos de los 50 puntos, marcando crecimiento del sector. Claro que nada indica que pueda caer y acercarse a tal nivel. Si eso sucede, los rendimientos de los bonos del Tesoro pueden seguir cayendo, y ello favorecerá a la onza de oro, que sigilosa se mueve apenas por debajo de los 2500 dólares, pero se prepara para asaltar sus máximos históricos y quebrarlos sin dificultades. El metal precioso tiene dos chances esta semana: el ISM de servicios mencionado y, más aún, el dato de empleos no agrícolas del viernes.

Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el viernes.

Vacantes de empleo, con el dólar en duda

Hola Amigos, buen día. Sin llegar a una cifra tan dramática como la del mes anterior, el ISM de manufacturas volvió a decepcionar a los mercados. La medición quedó lejos de los 50 puntos, y acentuó la presunción de que la Fed recortará su tasa de interés el próximo 18 de septiembre, aunque la duda está en si lo hará en 0.25% o 0.50%.

Pero lo que antes hacia volar a la bolsa, ante dicha presunción, ahora, con el hecho prácticamente descontado, genera preocupación. La bolsa de Nueva York tuvo su peor día en varias semanas, con los futuros del índice Dow Jones llegando al nivel del 22 de agosto, y el S&P 500 y Nasdaq 100 a mínimos que no tocaban desde el 15 de agosto.

El clima de negocios se enturbió, y los operadores se vuelcan a activos de refugio. El dólar vuelve a tomar fuerza en varios frentes, en especial ante el euro y la libra, que de todos modos conservan un sesgo alcista de mediano plazo, medidos en los gráficos semanales.

Por el contrario, el yen se aprecia frente al volátil comportamiento bajista de los rendimientos de los bonos del Tesoro, que cerraron el martes a 3.83%. Los informes de ISM movieron fuete a los bonos como refugio, desplomando a sus rendimientos.

Pese a ello, el oro no logró encontrar el camino para superar claramente 2500 dólares. Su baja se acentuó en el inicio de la sesión americana, aunque ya en las primeras horas del miércoles apunta nuevamente a dicho nivel. Lejos quedan los máximos históricos del 20 de agosto en 2532 dólares.

En este contexto se destaca la caída del petróleo, afectado no solo por los datos de Estados Unidos, sino por el ISM de manufacturas de China, conocido el sábado pasado, que quedó por debajo de los 50 puntos por cuarto mes consecutivo, generando preocupación por el crecimiento económico global.

Los futuros del WTI llegan a su mínimo desde el 8 de enero pasado, apenas por encima de los 70 dólares, y con una perspectiva bajista para las próximas horas. Es verdad que el anuncio de varios países de la OPEP+ de reducir los recortes de producción también están pesando en el precio de la materia prima.

La agenda de este miércoles anuncia un día agitado. Las vacantes de empleo en Estados Unidos, a las 10:00 del este, podrían volver a caer, lo cual anticiparía una nueva baja del billete en todos los frentes. Se espera que las vacantes hayan caído el mes pasado, algo que viene sucediendo en los últimos meses.

El euro presenta una tendencia bajista marcada, que sin embargo encontró soporte en el 38.2% de retroceso de su alza anterior. Si logra sostenerse por encima de 1.1105, la moneda única podría acelerar una recuperación a mediados de la sesión americana, para apuntar nuevamente a 1.1165/70.

La libra esterlina se mueve en torno a 1.3100, también con tendencia bajista, que luce algo agotada en la sesión asiática del miércoles. La superación de 1.3160 le daría fuerza para buscar 1.3200 durante la sesión americana.

Por su parte, el recupera lentamente posiciones, cotizando a 145.29, con una tendencia que lo favorece para las próximas horas. Los comentarios del gobernador del Banco de Japón, Sr. Ueda, prometiendo mayor dureza en la política monetaria de su entidad, están provocando que el yen comience a buscar la zona de 141.00, donde dejó un gap a fines de diciembre pasado.

Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el jueves.

Dato de manufacturas: ¿Respaldo para el dólar?

El mes de septiembre comenzó con un día festivo en Estados Unidos, por lo que la acción de los mercados fue prácticamente nula. Aún así, el yen volvió a perder posiciones en horario asiático, acelerando su caída en la sesión europea, en tanto el euro logró mantenerse por encima de 1.1030, cuyo quiebre pondría en peligro su tendencia alcista de corto plazo.

En este contexto, el dato de ISM de manufacturas, que se conocerá este martes a las 10:00 del este, puede resultar decisivo para la trayectoria del dólar. El antecedente de agosto fue muy negativo, en un mínimo de varios años, y será difícil que algo así vuelva a suceder. Se espera que la medición quede lejos de los 50 puntos que separan contracción de expansión del sector, aunque bastante más cerca que el mes pasado.

Si esto ocurre, el dólar encontrará un nuevo motivo para seguir escalando posiciones, luego de un mes de agosto que lo vio caer durante varios días consecutivos, en especial al inicio del período, para terminar con algún alivio el mes en sus principales paridades.

El dato mencionado fue, justamente, el que desencadenó una venta masiva de dólares, dato al cual siguió un débil informe de empleos de julio. El clima de negocios, que ya venía complicado por el aumento de tasa de interés por parte del Banco de Japón, terminó por sacudir al billete en todos los frentes.

El panorama es distinto, apenas 30 días después. La Fed ya dejó en claro que recortará la tasa de interés en su reunión del día 18 de septiembre, y la duda es si el recorte será del 0.25 o del 0.5%. Los pronósticos, por ahora, se vuelcan a un recorte mínimo, en cuyo caso el dólar no tendrá tanto que perder.

Así lo percibe Wall Street. Los datos de inflación por consumo, conocidos el viernes, dieron cuenta de una discreta baja en el costo de vida en julio en este sentido, pese a lo cual el dólar se valorizó en buena forma ante el euro, la libra esterlina, el yen y el oro.

Si los pronósticos de los datos de esta semana se cumplen, el billete se verá ampliamente beneficiado. El euro no encuentra la forma de acercarse a sus máximos del año en 1.1200, mientras la libra ya quedó lejos de sus máximos anuales en 1.3265 de la semana pasada. Con todo, la moneda británica luce mejor que el euro.

La onza de oro se aleja, al menos por ahora, de sus máximos históricos del 20 de agosto en 2532 dólares. El alza de los rendimientos de los bonos del Tesoro está impactando negativamente en el metal precioso, aunque su baja parece circunstancial. Su enorme volatilidad y la gran amplitud de precios que suele ofrecer a diario mantienen expectantes a los inversores, que perciben nuevos máximos históricos para dentro de poco tiempo. Sobre todo si, como se espera, la Fed recorta su tasa en los próximos meses.

Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el miércoles.

El dólar se fortalece, pese a las noticias

Hola Amigos, buen día. A modo de toma de beneficios (o asunción de pérdidas, según se vea) el dólar se fortaleció el viernes en todos los frentes. Esto ocurrió a pesar de que los datos de inflación por consumo mostraron en julio una baja respecto a la medición anterior, lo cual impulsa una vez más a la Fed a recortar la tasa de interés este mes, puntualmente el día 18, cuando tenga lugar la próxima reunión de política monetaria.

Así, el euro perdió la cota de 1.1100, y su tendencia luce bajista para este lunes, con un primer soporte en 1.1030, seguido de 1.1005. La moneda única también estará pendiente este mes de las acciones del Banco Central Europeo, que podría recortar la tasa de interés como ya lo ha hecho en junio, ampliando en su hora la brecha con la Fed.

Técnicamente, el euro se perfilaba desde el miércoles pasado hacia una baja importante, aunque las noticias no parecían acompañar tal movimiento. La formación de hombro cabeza hombro medida en el gráfico de 4 horas es determinante en esta caída del euro, que no encontrará motivos para recuperarse este lunes.

La libra esterlina también cayó fuerte el viernes, aunque detuvo su baja en una línea de tendencia alcista proveniente de mediados de agosto, confirmando su tendencia alcista de corto plazo. Solo abajo de 1.3100 la libra confirmaría un cambio de tendencia, aunque el rebote en la línea mencionada podría favorecerla. La zona de 1.3160 aparece ahora como la resistencia a seguir.

El yen, en cambio, cayó sin atenuantes frente al dólar el viernes, ante el alza importante de los rendimientos de los bonos del Tesoro, con las notas a 10 años que finalizaron el mes al 3.90%. La moneda nipona perdió buena parte de sus ganancias de la semana anterior, aunque mantiene un tono alcista de cara al resto del mes. El cierre del viernes, en 146.10, sugiere que el par USD/JPY puede extender su alza a la zona de 147.10, 61.8% de retroceso del movimiento 149.30/143.60, nivel que tocó la semana pasada.

La onza de oro también sufrió el alza de los rendimientos de los bonos del Tesoro, quebrando la cota de 2500 dólares, y vulnerando una línea de tendencia alcista medida en el gráfico de 4 horas. Solo la superación de 2515 dólares le devolverá a la onza su tendencia alcista de corto plazo, para buscar en su caso 2532 dólares, los máximos históricos del 20 de agosto.

Los movimientos de este lunes serán moderados durante buena parte del día, y nulos en horario americano. Se celebra el Día del Trabajo en Estados Unidos, por lo que la actividad se verá totalmente limitada.

Sin embargo, la agenda de noticias de la semana anticipa días agitados. Los ISM de manufacturas y servicios, las vacantes de empleo, y las nóminas de empleo privadas (ADP) y no agrícolas, publicadas por el Departamento de Trabajo, serán las claves de esta primera semana de septiembre.

Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el martes.